Para Romero, "una mera relación de los regalos recibidos por el rey y su familia constituirían un escándalo ética y políticamente inaceptable para un país que tenga las mínimas normas de la gestión pública y de la ética en el desempeño de funciones públicas". "Por ejemplo, en EEUU no se pueden aceptar regalos personales que estén valorados en más de 150 dólares, en el resto de países europeos hay normas similares, e incluso en la monarquía británica hay control sobre los bienes que deben adscribirse al patrimonio del Estado", recordó Romero.
Comentarios
¡Qué más da! ¡Si es muy campechano! [IRONIC]
El último yate Fortuna, que costó varios miles de millones(de pesetas), fué un regalito de un grupo de empresarios. Seguro que esos empresarios no consiguen ninguna licencia de obras del Estado, los pobres
El rey lo único que hace es firmar leyes y viajar como embajador. No creo que le pueda influir mucho un regalo. Además, ya cobra una buena parte de los presupuestos generales.
El rey no concede licencias de obras
Es lo que pasa cuando no tienes por qué dar cuentas a nadie de en qué te gastas el dinero.
#5 Fue regalo de los hoteleros mallorquines. Y, por mal que me caigan, no creo que obtuviesen ningún beneficio directo de ello, más allá de que el rey y su yate son famosetes y llaman la atención, lo cual redunda en más turismo.
#7 Destaca en sus relaciones el conocido como `clan de Las Cuatro Estaciones”, nombre del restaurante del que Miguel Arias, Joaquín Vázquez Alonso, Jaime Cardenal Pombo y el propio rey son socios. Algunos aparecieron implicados en la trama de Ibercorp. Entre ellos se tejió una tupida trama de negocios. Cardenal Pombo fue socio de Borja Prado (hijo de Manuel Prado) en el sector armamentístico. Este último también coparticipa, junto a su madre Paloma Eulate y la Infanta Elena en la empresa Micos Mi Primer Cole, SL. Borja Prado fue requerido como testigo por parte de la Audiencia Nacional en la instrucción del caso Banesto y se ha visto relacionado con traficantes de armas.
Joaquín Vázquez Alonso fue el constructor que remodeló en su día el Palacio de la Zarzuela, y socio de Cardenal Pombo y Arias en varios negocios inmobiliarios.
La desaparecida revista de investigación Kalegorría indicaba que próximo a este grupo estaba Francisco Sitges, ex presidente de Asturiana de Zinc y ex propietarios de los astilleros Mefasa. Esta empresa fue la encargada de construir el yate Fortuna, tras una adjudicación estatal. Sitges acabó en el banquillo de los acusados del caso Banesto.
El paraíso mallorquín
Mallorca ha sido el otro espacio de ilustres amistades del monarca, en este caso mucho más aristocráticas. Allí, el rey Juan Carlos intimó con el príncipe Zourab Tchokotua, un aristócrata georgiano que fue procesado por un juzgado mallorquín en 1978 y en 1992 en relación con presuntas estafas inmobiliarias. En la última instrucción figuraba también su socio Oliver Mateu, otro hombre cercano al rey. Según Kalegorría, el clan Mallorca se completaba con un grupo selecto de empresarios hosteleros.
El rey fue fotografiado el 7 de agosto de 1990 en Puerto Portals, junto a sus amigos Giovanni Agnelli (dueño de FIAT) y Raul Gardini, ex presidente de Montedilson, la empresa química a la cual Juan Abelló vendió su laboratorio Antibióticos con un beneficio de 450 millones de dólares. Tanto Agnelli como Gardini se vieron implicados en casos de corrupción en Italia. Este último se suicidó en 1994.
Es público que el Fortuna II fue financiado por un grupo de empresarios mallorquines, los cuales juntaron 17,5 millones de dólares para hacer el regalo real. Hoy el monarca navega en el Fortuna III, valorado en más del doble que el anterior.
Mallorca es una buena fuente de ingresos para el rey en patrocinios, ropa y equipamientos deportivos, bebidas y relojes para la familia real, convertida en un atractivo modelo publicitario a veces subliminal y otras descarado.
#18 Te debí causar una honda impresión porque hace mucho tiempo que prácticamente no comento nada en 20 minutos (salvo en la columna de Manolo Saco). Aunque allí tuve algunos comentarios muy buenos.
#15 Seríamás correcto decir que no las firma.
#7 claro claro... sueltan 6000 millones de pesetas como un acto generoso y filantropico no te jode jejeje
#8 Si comparas las cuentas de un político que ni siquiera ostenta un cargo público con las del Jefe de Estado que se ha hecho multimillonario a nuestra costa es que eres muy pero que muy cortito. Pero mucho.
Estoy tentado de empezar a votar microblogging cada vez que -por desgracia cada vez con más frecuencia- Menéame promociona un comentario critico con algún artículo de opinión o noticia original que es silenciada a su vez por no ser debidamente progresista.
¿Dónde está el artículo original de Antonio Romero?
Silenciar así a la gente oyendo solo la parte del pastel que nos interesa, debidamente manipulada en manos de un mindungui me parece poco ético.
#0 Ahora que sigan investigando a los empresarios que hace regalos a la casa real, si quieres.
#5 El yate lo inscribió como patrimonio nacional y se ahorró pagar "las revisiones"
El Rey inscribió el yate "Fortuna" como propiedad del Patrimonio Nacional para ahorrarse el mantenimiento
El Rey inscribió el yate "Fortuna" como...
lahaine.orgSe tiraría por la borda del Fortuna con una piedra al cuello.
Cohecho, tráfico de influencias... al orden del día. Aprovecharte de tu puesto público gubernamental para tus negocios privados debería de estar severamente penado por la ley... oh wait! que este puede matar hasta su hermano y no le pasa nada...
No tengo ni la más remota idea de que quiere decir Romero con eso de una auditoría, porque la palabra significa "Revisión e inspección de la contabilidad de una empresa, entidad o institución, realizada por un auditor" pero suponiendo que quiera decir una investigación, el caso es que al contrario que Camps o Barberá el rey no decide nada y no tiene arte ni parte en la adjudicación de contratos; eso es competencia del gobierno (o más bien, de los distintos gobiernos, el nacional y los autonómicos y municipales).
#16 Oh, Dios, un invasor del 20 Minutos... y además, es Estebán Rosador (quienes visiten 20 Minutos saben más que de sobra por qué lo digo)
Y no, el rey no concede licencias de obras, y tampoco las firma. Es más, de las que cosas que sí firma el responsable es quien toma la decisión, que no es él: es el presidente del gobierno, o en su caso el ministro del ramo.
Solo hay una excepción: la designación del candidato a la presidencia del gobierno, esa sí es una decisión suya (miento, olvidaba otra, los nombramientos dentro de la Casa Real, que también son decisión suya).
#9 Nada de generoso y filantrópico, simplemente es una inversión publicitaria como la de hacer que Rafa Nadal diga lo guays que son las Islas Baleares.
Si el rey tiene yate mallorquín, vendrá a Mallorca a veranear. Eso atraerá a un montón de gente que se sentirá más guay por eso de veranear en el mismo sitio que el rey, lo cual les da beneficios a los hoteleros. Ahí está el beneficio, pero lo que dudo mucho es que los hoteleros recibiesen ningún beneficio directo del rey, más que nada porque el hombre no tiene mucho margen que digamos para hacer leyes, gobernar, ni nada.
#12,
Yo es que sólo valoro a los que predican con el ejemplo. Por cierto, hasta 2008 ostentó cargo público.
Y esto lo dice el que publica en Internet todas sus cuentas y patrimonio, y el de su formación, para que todo el mundo vea lo transparentes que son.
Ah, no, que no lo hace.
Antoñito, hijo, y la culpa de quién es del rey o de los políticos que nos gobiernan, que no han sabido-querido legislar sobre este asunto, quizás por que también son los beneficiarios. El Rey no puede legislar sobre el asunto. También me gustaría saber que tipo y valor de los regalos que hacen nuestros políticos y el Rey entre ellos y otras personalidades de aquí o del extranjero.