Publicado hace 13 años por Limonete a iniciativadebate.wordpress.com

Excelente, contundente y “valiente” artículo de J. Torres López y A. Garzón Espinosa (casi de obligada lectura)

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Deberiamos colgar en la Plaza Mayor al Gobernador del Banco de España , a los Politicos y a los Banqueros

MAFO, según sus palabras ya ha hecho todo lo que tenía que hacer, a saber:

1) A consecuencia de la mala supervisión de la banca por parte de los reguladores (BdE, BCE), el estado ha tenido que desembolsar enormes cantidades en el FROB, garantizar préstamos bancarios a mansalva, poniendo su solvencia en peligro, y con un coste enorme en términos de intereses a pagar y de riesgos percibidos por los mercados.

2) No contentos con no haber realizado su tarea adecuadamente, y con obligar al estado a sacar las castañas del fuego con un coste cuyos límites están aun por ver, los banqueros centrales se permiten la soberbia de dar lecciones sobre política fiscal y de indicar a otros sus tareas, cuando ellos exigen independencia absoluta en sus funciones.

3) MAFO y sus secuaces apenas han iniciado lo que debería ser su tarea. Han permitido a los bancos actuar como el perro del hortelano. Permite conflictos de intereses creados por la afición de los bancos a no reconocer pérdidas embolsándose montañas de promociones que retienen en sus carteras. De esta manera, los bancos tratan de evitar la necesaria corrección en los precios de vivienda, que sería esencial para que algún día España salga de la crisis. Los bancos son inmobiliarias, agentes de ventas y prestan el dinero para la venta, de modo que están involucrados como parte interesada en todas las fases del proceso, generando un problema por el lado de la oferta ya que dificultan la financiación para adquisiciones de viviendas que no son suyas, perjudicando a todos los promotores que aún no han ido a la quiebra.

4) Gracias a la inacción de MAFO y sus secuaces el mercado inmobiliario, verdadero y casi único motor de la economía española, estará gripado desde que en 2007 inicara su caída, durante por lo menos dos lustros garantizando elevadas tasas de desempleo en el horizonte, por mucha flexibilidad que se quiera imponer.

MAFO es un personaje rancio y anticuado. No ha hecho su trabajo y se permite dar lecciones a los demás.

Por mí que lo echen.