Mercedes Ballesteros, investigadora de la Unidad de Biomasa del Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat), afirma que producir etanol es posible a partir de residuos sólidos urbanos, es decir, de la basura doméstica orgánica. “Hemos buscado otras materias que no compitan con los alimentos y hemos optado por los residuos“ relacionada:Corregir es de sabios: la UE se replantea el bioetanol