Hace 5 años | Por Joya a elindependiente.com
Publicado hace 5 años por Joya a elindependiente.com

Llegar a París después de la II Guerra Mundial era encontrarse con una ciudad que intentaba resucitar. El conflicto había destruido muchas de sus calles y, sobre todo, había eliminado ese clima festivo que caracterizaba a la que había sido la Ciudad de la luz. Pero incluso en aquella época, en la que la había perdido cierto brillo, cientos de artistas encontraron en ella el lugar donde ser un poco más libres. Cómo dice Serge Guilbaut, comisario de una exposición sobre ellos en el Museo Reina Sofía,