Publicado hace 13 años por shindenfudo a elfarodelacolina.blogspot.com

Los violentos sucesos de Cataluyna son sintomáticos del interés por parte de los poderes, de que la ciudadanía vuelva al estado de letargo en el que se encontraba hasta el 14 de mayo. El miedo a la agresión institucionalizada no puede convertirse en elemento de desincentivo a las movilizaciones pacíficas. Los demócratas hemos de exigir a los políticos su compromiso a no utilizar la violencia contra los ciudadanos, preservando así su derecho a la expresarse y a manifestarse libremente.

Comentarios

d

nos tienen miedo porque no tenemos miedo