La policía de Kyoto ha arrestado a un hombre de 50 años por sospechar que ha robado una consola portátil de videojuegos y el juego que llevaba insertado, a un niño de ocho años. El niño estaba con sus padres, pero en una visita al cuarto de baño, su consola desaparecó; el padre, viendo el disgusto de su hijo, acudió a una tienda de videojuegos que estaba apenas cien metros del supermercado donde vieron la consola por última vez, y encontró una consola igual a la de su hijo, e incluso el mismo juego, todo de segunda mano.
Comentarios
Creo que es un poco irrelevante...será por consolas robadas al día... ¿Es esto un suceso reseñable de verdad?