Hace 18 años | Por mig21 a wired.com
Publicado hace 18 años por mig21 a wired.com

Los argumentos que se suelen usar para la defensa del derecho a la intimidad suponen que se oculta algo malo, pero Bruce Schneier en este artículo breve recuerda que este derecho es una necesidad humana básica y de ahí debería partir su defensa. Vía pjorge (http://pjorge.com/archivo/2006/5/29/21:24:43/)

Comentarios

ramOn

Acostumbro minimizar los reclamos de intimidad, ante la cada vez mayor presencia de "ojos electrónicos" en las calles, por razones de seguridad, por ejemplo; pero ciertamente que no me parece válido el argumento "si no estás haciendo algo malo, no te preocupes" si alguien no me saca los ojos de encima o me pone un micrófono o cámara en casa para oir y/o ver todo lo que digo o hago. Al menos si no tiene orden judicial.