Publicado hace 14 años por pablofmorales a tatooka.wordpress.com

Fragmento El Maestro Pan Ming solía contar una fábula: “Aergia programaba estructuradamente, y su código crecía y crecía, verticalmente, hasta que un día fue tan alto y tan profundo que temblaba hasta sus cimientos, amenazando con desplomarse sobre un pueblo cercano. Escuchando las súplicas de los campesinos, Horme se acercó, tocó la torre de código y lo modularizó. Creó una función para cada algoritmo repetido, renombró variables ambiguas e indentó los escalones convexos de la frágil torre...