Recientemente, un equipo de la Universidad de Cambridge ha descubierto la verdad sobre una de las fábulas de Esopo. “El cuervo y el cántaro”, en el que un cuervo sediento arroja piedras dentro de un cántaro para elevar el nivel del agua de modo que pueda beberla. Cuando les presentaban a un deseable gusano flotando fuera de su alcance, al final de un tubo estrecho, el cuervo empleó piedras para elevar el nivel del agua y de este modo alcanzar al gusano con el pico.
Comentarios
Y es que los cuervos no son tontos... La fascinante inteligencia de los cuervos
La fascinante inteligencia de los cuervos
pijamasurf.comMe pregunto si en la misma situación a un humano se le ocurriría al momento esta solución tan ingeniosa.
En este post de Wired incluyen vídeos de las proezas de los animalicos:
http://www.wired.com/wiredscience/2009/08/aesopscrows/
#6 Ups, quería decir maikelnai, pequeño lapsus (es que estaba viendo también fogonazos cuando vi tu comentario)
Los cuervos son inteligentes. Muy inteligentes, hacen rituales a los muertos, recuerdan donde guardan cosas, entienden la relación causa-efecto...
Moraleja: Si comes chorizo, te pica la boca...
¿Con el poco o con el pico?
#3 Con el pico, me acabo de fijar también en fogonazos y lo acaba de corregir, gracias
#4 ¿Fogonazos?