No se puede ser tan moderno. Es lo que habrá pensado la organización de la Feria del Libro de Madrid que tendrá lugar a partir del 29 de mayo en la capital española. Según el reglamento de la Feria, queda terminantemente prohibida la participación de editores y empresarios que se dediquen a la comercialización de cualquier producto relacionado con el libro electrónico: lectores como el Kindle o el Papyre 6.1 e incluso títulos en formato digital.