Las funcionarias de la prisión de Valencia han puesto en marcha una plataforma para evitar que sus servicios se extiendan a los módulos de hombres, tal como contempla la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias. Entienden que su físico no es el apropiado para tratar con varones potencialmente conflictivos y temen que algunos colectivos, como el musulmán o el gitano, no asuman correctamente sus órdenes.
Comentarios
Es lo que tiene el llevar la ley de igualdad a su extremo, que no están de acuerdo ni las mujeres ni los hombres.
coño!!! por fin alguien aplica la logica en el tema de la igualdad.