El Gobierno está preparando una fuerte subida de los impuestos especiales que gravan las bebidas alcohólicas para aumentar la recaudación del Estado. Según han confirmado a elEconomista fuentes de toda solvencia, Hacienda está barajando en este momento una subida de entre el 8 y el 10 por ciento de las tasas que gravan a los espirituosos, dejando en principio fuera tanto a la cerveza, que tiene una presión fiscal menor, como al vino, que no paga impuestos especiales.
Comentarios
Ya hago yo mi aportacion particular
Como artículo prescindible, lujo y capricho, me parece bien; la parte comercial-producción-distribución lo notará...
El Gobierno planea subir los impuestos especiales al alcohol hasta un 10%
Excepto en el gintonic Gintonic para combatir la malaria
Gintonic para combatir la malaria
ojocientifico.com#4: ¿Con fresitas, hojitas de menta, gominolas, miguitas de pan...?
Yo una vez me tomé un gin-tonic con pan y con chorizo y sin ginebra ni tónica.
#7: Genial, así podría tener un caldo de cultivo en el que fundar mi propia mafia. Iré comprándome un subfusil Thompson con
revistacargador de tambor.#10 Tranquilo, te trincaran por evadis impuestos, Al.
#11 ya pocos a los que echar la culpa quedan, por que los que todavia quedan, seria politicamente incorrecto echarles la culpa (enfermos, parados, inmigrantes, trabajadores no esclavizados) y ellos nunca tendran la culpa.
NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO
Pues menos mal que no iban a subir los impuestos que afectaran directamente a la hostelería
¡Viva el vino!
No con mi whisky hijos de puta! Al final me mandan al paro
http://awardrobeofwhisky.com para el que quiera cuidarse el higado
Hijos de puuuuuuuuuutaaaaaaaa!!!!! :(
A ver si ahora la culpa la tenemos los borrachos
La verdad es que los impuestos especiales sobre las bebidas alcohólicas son bajísimos. Yo los multiplicaba por diez o quince, solo así tendrían un efecto desincentivador. Deberían estar ligados a la venta y ser de un céntimo por mililitro de alcohol puro contenido o algo así.
El problema es que la ideología criminal del liberalismo ha infectado hasta tal punto a esta sociedad que nadie se plantea que debamos avanzar hacia una sociedad sin alcohol, una sociedad abstemia, que de entrada se ahorraría muchísimas muertes prematuras.