Publicado hace 15 años por calithos a devocionalescristianos.org

El vocero del jurado se puso de pie. Tenía que leer el veredicto en el juicio contra Julio González. Leyó primero el cargo: «Homicidio.» Inmediatamente después pronunció la palabra fatal: «Culpable.» Luego, con lentitud desesperante leyó otro cargo, y otra vez pronunció el veredicto: «Culpable.» Así fue leyendo cargos y pronunciando el mismo veredicto 176 veces. A Julio González lo hallaron culpable de 87 homicidios, con doble culpabilidad por cada uno. El 25 de marzo de 1990 González había prendido fuego a un salón de baile en Nueva York,