Hace 14 años | Por giles a ovejaselectricas.es
Publicado hace 14 años por giles a ovejaselectricas.es

En la ciudad de Namur, Bélgica, existe un viejo cementerio, abierto en 1885, escondido tras unos altos muros de piedra y una imponente puerta de hierro. A través de una escalera de caracol se accede a esta solitaria cripta, en la que el paso del tiempo no ha destruido su belleza arquitectónica. Las estalactitas de cal, las musgosas paredes y la impresionante atmósfera que crea la luz que se filtra por las claraboyas del techo hacen de este lugar un mundo sobrecogedor y misterioso.

Comentarios

kumo

Curioso, tenebroso... Y para variar últimamente, de videojuego... Le voy a empezar a coger manía a las fotos HDR. Debe ser... intranquilo... darse un paseo por allí.