La animación adulta ha dejado de ser un culto freak para integrarse en las parrillas españolas en horarios casi infantiles. Pero faltaba una serie hecha aquí, y ésta por fin ha llegado: la desquiciante Putokrío. Relacionada: La vida de un friki en un ácido y corrosivo cómic.
Comentarios
Me huelo que va a ser una mierda...