Hace 15 años | Por nibankan a yagamibooks.blogspot.com
Publicado hace 15 años por nibankan a yagamibooks.blogspot.com

Apenas era medio día cuando el engranaje del gobierno ya se había puesto en marcha. La amenaza era difusa, desconocida, incierta... quizás irreal. Los mensajes en televisión inquietaban, alarmantes e imprecisos, germinados por la oposición política. Activado el tercer nivel de amenaza terrorista, el CNI bulle ante la evidente falta de datos concluyentes [...]. Interesantísimo libro para leerse en un finde y se puede descargar gratis!

Comentarios

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Si alguien quiere vivir experiencias más fuertes que se acerque a Ascó y Vandellós, província de Tarragona, fallan más que una escopeta de caña.

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#2 Juzgo por el estilo de escritura, que me parece simplón y nada sugerente. Un buen libro es algo más que una buena historia (y si falta ese algo más, leer la historia se suele convertir en una pesadilla, por no decir, directamente, en una pérdida de tiempo).

ososxe

ya sabes... no se puede juzgar un libro por su portada. Yo lo estoy bajando, he leido el blog, asi que he leido algo mas que la entradilla, y no tiene mala pinta.

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Y digo yo una cosa... ¿No convendrá leerse la sinopsis entera o, en su caso, el libro entero para entrar a criticar?

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Pues o mejora mucho la novela más allá de lo que se ve en el primer post, o corre el riesgo de no valer ni los electrones en los que está escrita...

ososxe

#5 acabo de terminar el libro, probablemente no tenga tantos conocimientos de literatura como puedas tener tu u otros, y este libro no lo pondre con mis libros favoritos, creo que le falta algo de chicha a los personajes, pero como novela de ficcion-real, o como leches se diga, me ha parecido creible, y al final me ha sacado una lagrima. Eso es algo que con anterioridad solo lo habia hecho un relato de una superviviente de Chernobyl(Voces de Chernobil)

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#4 No sólo se producen fallos en las centrales nucleares, sino que se extravían bastantes bultos de material radiológico que nunca llegan a encontrarse. El CSN publica parte de los incidentes. La pregunta es, ¿adónde van a parar esos bultos y quién se los lleva?