Después de 18 años en Costa Rica, la cadena hotelera Barceló levanta polémicas por el vertido de aguas residuales de dos de sus hoteles y la posible construcción de un macroatracadero intimidando a pobladores. “Costa Rica, sin ingredientes artificiales” : éste es el eslogan turístico de Costa Rica. Pero el rápido crecimiento hotelero al margen de la legislación está haciendo tambalearse su pureza natura. Muchas empresas trasnacionales se están aprovechando de dicha situación, entre ellas se encuentra el grupo español Barceló.
Comentarios
Y qué tiene que decir el gobierno Costariqueño? Y cómo se intimida con un macroatracadero? También se intimida a los miles de trabajadores que gracias al esfuerzo de una empresa, sea cual sea su nacionalidad, crea riqueza allí?
Es que me revientan estas noticias redactadas en tono lastimoso e hipócrita: en cualquier país civilizado se sanciona a las empresas que realizan vertidos ilegales o que construyen sin licencia. Es la responsabilidad del gobierno local.
Por favor, maduren y dejen de quejarse!