Unos cuantos psicólogos de pacotilla dicen que tengo un CI por encima de la media desde hace tiempo, y toda esta gente (entre los que incluyo a mi familia) están convencidos de que puedo hacer todo lo que yo quiera sólo porque soy algo más inteligente que la media. Pues bien, señores, entérense: NO PUEDO
#6:
La casi totalidad de superdotados están condenados a la mediocridad, pues jamás desarrollan su ventaja. En lugar de ello, dedican su infancia y juventud a la ley del mínimo esfuerzo: ¿para qué esforzarse si moviendo apenas un meñique ya consiguen todo el rendimiento intelectual que les exige su entorno?
Y son muy conscientes de ser superiores, pero curiosamente en lugar de considerarse listos tienden a considerar tontos a los que les rodean, porque para ellos ser listo es lo natural.
Pero siempre hay un momento, un punto de inflexión en que sin esfuerzo no se progresa. Y entonces la cosa cambia. De pronto los tontos que les rodean les pasan delante aparentemente sin mover un dedo. ¿Qué ha sucedido?
Sencillamente que los que se han entrenado esforzándose toda su vida lo tienen mejor para adaptarse y aguantar el ritmo, mientras que los superdotados tienen que empezar a aprender a esforzarse a una edad mucho más avanzada.
A partir de ese momento los superdotados pasan a ser los tontos. Y la mayoría no se recuperan jamás.
Y es que es muy diferente ser listo y ser espabilado. La inteligencia técnica y la inteligencia emocional no van de la mano, de modo que los superdotados reciben el beso de la muerte al ser sobrevalorados cuando son jóvenes, para luego ser menosvalorados y caer en la nada cuando son adultos.
A la autora del "blog" le diría que no sólo haga caso de los que le meten caña, sino que ella misma se plantee retos que vea imposibles y los consiga. Porque sólo así desarrollará su ventaja y podrá sacar partido de ella en el futuro. De lo contrario, tras un inmenso desengaño respecto a su coeficiente intelectual, le espera una larga vida de mediocridad absoluta.
La casi totalidad de superdotados están condenados a la mediocridad, pues jamás desarrollan su ventaja. En lugar de ello, dedican su infancia y juventud a la ley del mínimo esfuerzo: ¿para qué esforzarse si moviendo apenas un meñique ya consiguen todo el rendimiento intelectual que les exige su entorno?
Y son muy conscientes de ser superiores, pero curiosamente en lugar de considerarse listos tienden a considerar tontos a los que les rodean, porque para ellos ser listo es lo natural.
Pero siempre hay un momento, un punto de inflexión en que sin esfuerzo no se progresa. Y entonces la cosa cambia. De pronto los tontos que les rodean les pasan delante aparentemente sin mover un dedo. ¿Qué ha sucedido?
Sencillamente que los que se han entrenado esforzándose toda su vida lo tienen mejor para adaptarse y aguantar el ritmo, mientras que los superdotados tienen que empezar a aprender a esforzarse a una edad mucho más avanzada.
A partir de ese momento los superdotados pasan a ser los tontos. Y la mayoría no se recuperan jamás.
Y es que es muy diferente ser listo y ser espabilado. La inteligencia técnica y la inteligencia emocional no van de la mano, de modo que los superdotados reciben el beso de la muerte al ser sobrevalorados cuando son jóvenes, para luego ser menosvalorados y caer en la nada cuando son adultos.
A la autora del "blog" le diría que no sólo haga caso de los que le meten caña, sino que ella misma se plantee retos que vea imposibles y los consiga. Porque sólo así desarrollará su ventaja y podrá sacar partido de ella en el futuro. De lo contrario, tras un inmenso desengaño respecto a su coeficiente intelectual, le espera una larga vida de mediocridad absoluta.
Ok ya sabemos que tienes un cociente por encima de la media, pero para tranquilizarte y que no te sientas un bicho raro te diré que lo tuyo es algo bastante habitual, casi la mitad de la humanidad, más concretamente el 49 % también está por encima de la media.
#12 Yo no hablo de fracaso escolar. Hablo de fracaso vital, en el adulto. ¿A quién coño le importan las notas? Es precisamente ese error de evaluar numéricamente a una persona el que encumbra a los superdotados cuando son niños y les hunde cuando son adultos.
¿Nunca te has topado con el tipico sabio "friqui" y solitario, que domina de todo pero es incapaz de relacionarse? ¿O con el típico comercial leño, corto y algo maleducado que sin embargo cae bien y es un triunfador en la vida? ¿Quién es el listo? ¿Te sirve el expediente académico para medir ese tipo de cosas?
Si el niño es tonto o no, se ve en muchos otros factores, no en las notas.
#8 No he generalizado, en todo momento me he referido a "la mayoría" o "la casi totalidad" de superdotados, lo cual es perfectamente cierto. Podría añadir estudios y cifras, pero a costa de desvirtuar totalmente la explicación.
La conclusión cierta es que un superdotado que va a un colegio normal, que ve que todo es fácil para él y nada requiere esfuerzo, que es la delicia de sus padres por su educación y sus buenas notas, que es alabado por todos por las monerías con las que él sabe perfectamente que se mete a los adultos en el bolsillo,... en definitiva, un niño superdotado que no se vea sumergido desde la niñez en un ambiente de alta exigencia intelectiva (al nivel de su superior capacidad), está prácticamente condenado a perder su potencial ventaja y, en la mayoría de casos, a quedar en desventaja respecto a los demás.
Habría que saber, primero, que implica tener un CI por encima de la media. Como si saber resolver puzles o memorizar textos te eximiese de ser un perfecto gilipollas.
#10 Te aplaudo por segunda vez. Comprendo lo que dices .Pero la última frase no me gusta. Hay mucho más fracaso escolar entre los que tienen CI por debajo de la media que entre los cuatros superdotados incomprendidos.
#11 Tener un CI elevado es sólo una ventaja potencial, que si no se desarrolla no sirve para nada. De hecho usualmente actúa en contra del desarrollo del individuo a lo largo de toda la niñez y la adolescencia, como ya he explicado.
Como ha insinuado #4 (que por ello se ha llevado mi voto), de hecho tener un CI elevado es también una carga. Aunque el niño no la percibe como tal, el niño se limita a escoger las opciones que le suponen un esfuerzo menor o nulo (en contra de lo que le conviene a su desarrollo) y huir siempre del esfuerzo porque él percibe desde siempre que las cosas se consiguen sin esforzarse.
Desde luego el coeficiente intelectual (sea alto o bajo) no exime de ser un perfecto gilipollas, así como tampoco exime de ser un perfecto sabio empático. Como ya he dicho, la inteligencia técnica y la emocional son cosas muy diferentes (la emocional viene determinada principalmente por la experiencia y varía más a lo largo de la vida, mientras que la capacidad técnica suele permanecer más inmutable), y el desarrollo de ambas depende casi por completo del entorno como muy bien decía #8.
Lo deseable es que ese entorno no sea gilipollas y perciba el potencial, lo fomente y ayude al superdotado a desarrollar su ventaja. Mientras los profesores sigan siendo totalmente despreocupados y los padres tengan miedo de llevar a su niño a un "colegio de monstruitos", la abultadísima estadística de superdotados decepcionados y decepcionantes no bajará.
Comentarios
La casi totalidad de superdotados están condenados a la mediocridad, pues jamás desarrollan su ventaja. En lugar de ello, dedican su infancia y juventud a la ley del mínimo esfuerzo: ¿para qué esforzarse si moviendo apenas un meñique ya consiguen todo el rendimiento intelectual que les exige su entorno?
Y son muy conscientes de ser superiores, pero curiosamente en lugar de considerarse listos tienden a considerar tontos a los que les rodean, porque para ellos ser listo es lo natural.
Pero siempre hay un momento, un punto de inflexión en que sin esfuerzo no se progresa. Y entonces la cosa cambia. De pronto los tontos que les rodean les pasan delante aparentemente sin mover un dedo. ¿Qué ha sucedido?
Sencillamente que los que se han entrenado esforzándose toda su vida lo tienen mejor para adaptarse y aguantar el ritmo, mientras que los superdotados tienen que empezar a aprender a esforzarse a una edad mucho más avanzada.
A partir de ese momento los superdotados pasan a ser los tontos. Y la mayoría no se recuperan jamás.
Y es que es muy diferente ser listo y ser espabilado. La inteligencia técnica y la inteligencia emocional no van de la mano, de modo que los superdotados reciben el beso de la muerte al ser sobrevalorados cuando son jóvenes, para luego ser menosvalorados y caer en la nada cuando son adultos.
A la autora del "blog" le diría que no sólo haga caso de los que le meten caña, sino que ella misma se plantee retos que vea imposibles y los consiga. Porque sólo así desarrollará su ventaja y podrá sacar partido de ella en el futuro. De lo contrario, tras un inmenso desengaño respecto a su coeficiente intelectual, le espera una larga vida de mediocridad absoluta.
#1 En realidad es el 50%, y el 50%-1 a ratos, según si el total somos pares o nones en ese instante
Ok ya sabemos que tienes un cociente por encima de la media, pero para tranquilizarte y que no te sientas un bicho raro te diré que lo tuyo es algo bastante habitual, casi la mitad de la humanidad, más concretamente el 49 % también está por encima de la media.
Se confirma los listos se pasan de rosca y creen que los demás les manipulan
no puedooorrr, tu lo que tienes es menos luces que el coche de los Picapiedrarrrs
#12 Yo no hablo de fracaso escolar. Hablo de fracaso vital, en el adulto. ¿A quién coño le importan las notas? Es precisamente ese error de evaluar numéricamente a una persona el que encumbra a los superdotados cuando son niños y les hunde cuando son adultos.
¿Nunca te has topado con el tipico sabio "friqui" y solitario, que domina de todo pero es incapaz de relacionarse? ¿O con el típico comercial leño, corto y algo maleducado que sin embargo cae bien y es un triunfador en la vida? ¿Quién es el listo? ¿Te sirve el expediente académico para medir ese tipo de cosas?
Si el niño es tonto o no, se ve en muchos otros factores, no en las notas.
Si quieres desgraciar a alguien, dile a su familia que es superdotado.
Nunca falla...
#8 No he generalizado, en todo momento me he referido a "la mayoría" o "la casi totalidad" de superdotados, lo cual es perfectamente cierto. Podría añadir estudios y cifras, pero a costa de desvirtuar totalmente la explicación.
La conclusión cierta es que un superdotado que va a un colegio normal, que ve que todo es fácil para él y nada requiere esfuerzo, que es la delicia de sus padres por su educación y sus buenas notas, que es alabado por todos por las monerías con las que él sabe perfectamente que se mete a los adultos en el bolsillo,... en definitiva, un niño superdotado que no se vea sumergido desde la niñez en un ambiente de alta exigencia intelectiva (al nivel de su superior capacidad), está prácticamente condenado a perder su potencial ventaja y, en la mayoría de casos, a quedar en desventaja respecto a los demás.
Joé ojala me hicieran a mi un test CI ¿los de internet son fiables?
No entiendo las críticas a la entrada del blog.
Habría que saber, primero, que implica tener un CI por encima de la media. Como si saber resolver puzles o memorizar textos te eximiese de ser un perfecto gilipollas.
#6 Nunca habia leido palabras mas sabias sobre este tema, las suscribo al 100%, tengo un amigo que lo ha sufrido..
#6 Te aplaudo, pero no generalices tanto, cada persona está en un entorno, que hace que sea como dices o todo lo contrario.
Porque esa igualdad superdotados = tontos o está otra superdotados = sin ansias de conocimiento, me temo que no se cumplen.
#10 Te aplaudo por segunda vez. Comprendo lo que dices .Pero la última frase no me gusta. Hay mucho más fracaso escolar entre los que tienen CI por debajo de la media que entre los cuatros superdotados incomprendidos.
#11 Tener un CI elevado es sólo una ventaja potencial, que si no se desarrolla no sirve para nada. De hecho usualmente actúa en contra del desarrollo del individuo a lo largo de toda la niñez y la adolescencia, como ya he explicado.
Como ha insinuado #4 (que por ello se ha llevado mi voto), de hecho tener un CI elevado es también una carga. Aunque el niño no la percibe como tal, el niño se limita a escoger las opciones que le suponen un esfuerzo menor o nulo (en contra de lo que le conviene a su desarrollo) y huir siempre del esfuerzo porque él percibe desde siempre que las cosas se consiguen sin esforzarse.
Desde luego el coeficiente intelectual (sea alto o bajo) no exime de ser un perfecto gilipollas, así como tampoco exime de ser un perfecto sabio empático. Como ya he dicho, la inteligencia técnica y la emocional son cosas muy diferentes (la emocional viene determinada principalmente por la experiencia y varía más a lo largo de la vida, mientras que la capacidad técnica suele permanecer más inmutable), y el desarrollo de ambas depende casi por completo del entorno como muy bien decía #8.
Lo deseable es que ese entorno no sea gilipollas y perciba el potencial, lo fomente y ayude al superdotado a desarrollar su ventaja. Mientras los profesores sigan siendo totalmente despreocupados y los padres tengan miedo de llevar a su niño a un "colegio de monstruitos", la abultadísima estadística de superdotados decepcionados y decepcionantes no bajará.
#13 Ahora Sí