Tobby, el perrito que tanta ilusión hizo al chiquitín de la familia en las últimas Navidades, era un estorbo y a alguien se le olvidó en la carretera. Para evitar que Tobby les siguiera –”nuestro perro es muy listo”– había que huir rápidamente del lugar, y a 210 kilómetros por hora por la autopista ya nadie podría relacionarles con el abandono. Así, en el particular balance de nuestro protagonista se acumulaban los dos primeros delitos veraniegos: maltrato y abandono de animales y conducta temeraria al volante.
Comentarios
Tenía ganas de leer algo sobre el abandono de animales, recuerdo cuando era más niño (Hace unos 7-8 años) que inundaban las televisiones con "No lo abandones, el nunca lo haría" y demás campañas de concienciación social... últimamente me cuesta dios y ayuda el volver a ver ese tipo de campañas y, por supuesto pienso que todavía no estamos completamente concienciados con el problema del abandono de animales... uno que es malpensado.
¿Fue una moda?¿Ya no interesa hablar sobre el abandono de animales?, por no hablar de los incendios, este verano no he escuchado (gracias a dios) noticias sobre incendios... pero... tampoco he visto anuncios del tipo "El monte es de todos", este verano no es noticia y por ello no se conciencia, se olvida, y es una pena.
En fin, ambos temas hay que repetirlos hasta cansarnos, no sólo cuando estemos en los momentos más graves sino todos los veranos que las personas somos tontas y nos olvidamos rapidamente de los problemas!
Muy buen artículo por cierto
#3 Para empezar, deberían prohibir tener un animal a quien maltrate o abandone uno.
yo hace tiempo propuse una solución a los ecologistas y ni caso, habría que ver si todos somos inocentes....
Ultimamente estoy viendo muchos animales atropellados en la carretera, pero lo de ayer me afectó bastante. En medio de toda la campaña contra el abandono de animales, me encontré ayer con un gato atropellado a la entrada a Coslada, y con un perro en la M50. No voy a entrar en detalles, pero desgraciadamente vi en primer plano como quedaron ambos animales, y uno se pregunta como puede haber gente tan carente de sentimientos para ser capaz de abandonar a su mascota.