¿Por qué nos gustan tanto las grasas? ¿Qué hace que un plato de patatas fritas nos resulte irresistible y que no podamos parar de comer tras probarlas? Una sustancia natural similar a la marihuana tiene la culpa según un estudio de la Universidad de California Irvine (EE UU).
En realidad, y como animalicos que somos, nos hemos adaptado al entorno. Si pensamos en cuando vivíamos en estado salvaje, ¿qué situación teníamos? Pues un suministro relativamente abundante y fácil de obtener de frutas y verduras, y un suministro escasísimo de grasas y proteínas en forma de animales que había que cazar. Como resulta que necesitamos un poco de todo, la forma que tiene nuestro cuerpo de motivarnos para agarrar la lanza e intentar cazar un mamut en lugar de comernos las acelgas (mucho más estáticas y fáciles de coger) es desarrollar un gusto especial por la grasa y todo lo que sea grasiento.
Por suerte o por desgracia, hoy día ya no tenemos tantos impedimentos para obtener comida, y la elección entre grasas o verduras se reduce a de qué estantería del súper cogemos la comida. Por tanto, y como seguimos siendo la misma especie que hace 40.000 años, nos sigue tirando mucho más todo lo que sea grasiento, por lo que acabamos comiendo muchas más grasas de las que necesitamos, y acabamos todos obesos perdidos.
Comentarios
También en... ¿Por qué no puedo comer sólo una patata frita?
¿Por qué no puedo comer sólo una patata frita?
elmundo.esNo creo que sea tan complicada la cosa.
En realidad, y como animalicos que somos, nos hemos adaptado al entorno. Si pensamos en cuando vivíamos en estado salvaje, ¿qué situación teníamos? Pues un suministro relativamente abundante y fácil de obtener de frutas y verduras, y un suministro escasísimo de grasas y proteínas en forma de animales que había que cazar. Como resulta que necesitamos un poco de todo, la forma que tiene nuestro cuerpo de motivarnos para agarrar la lanza e intentar cazar un mamut en lugar de comernos las acelgas (mucho más estáticas y fáciles de coger) es desarrollar un gusto especial por la grasa y todo lo que sea grasiento.
Por suerte o por desgracia, hoy día ya no tenemos tantos impedimentos para obtener comida, y la elección entre grasas o verduras se reduce a de qué estantería del súper cogemos la comida. Por tanto, y como seguimos siendo la misma especie que hace 40.000 años, nos sigue tirando mucho más todo lo que sea grasiento, por lo que acabamos comiendo muchas más grasas de las que necesitamos, y acabamos todos obesos perdidos.
Alguien me dijo una vez que la grasa hacía que los alimentos fueran más sabrosos... Y no puedo menos que darle la razón.
Por supuesto hay alimentos que están riquísimos (se me ocurre un buen plato de makis, por ejemplo) pero... No es lo mismo.
No se supone que es un potenciador del sabor?
otra droga mas...que las ilegalicen,que las prohiban