Arturo Pérez-Reverte habla sobre los desastres naturales y nuestro afán constructor

(C&P) Ya sería mala suerte. Por una ola gigante cada siglo y medio, por una Nueva Orleáns cada cinco, no vamos a desperdiciar la playa tal o la parcela cual, que piden ladrillo a gritos. Así que llenamos de pisos el Vesubio, reconstruimos San Francisco en el mismo sitio, y situamos quince mil plazas hoteleras en una playa que está a treinta kilómetros en línea recta del volcán submarino más próximo. (...) Hasta que toca, claro. Hasta que el piso que compramos sin fijarnos en que estaba en el cauce de un río seco se nos llena de agua.

[#1 giles]

Este comentario ya lo he hecho un par de veces por aquí, pero lo repito porque viene al caso:

Unas reglas de tres:
Nuevas urbanizaciones–––––––Menos vegetación
Menos vegetación–––––––––-Menos infiltración
Menos infiltración––––––––-Más escorrentía
Más escorrentía––––––––––Más inundaciones
Más inundaciones–––––––––-Más muertes

[#7 giles]

#6 Parece mentira, pero en el artículo, de las palabras que has puesto sólo sale la palabra "antes"

[#2 NMo]

Reverte, apellido comienza por mayúscula para quien pueda editarlo

[#4 Kartoffel]

#2 ¡Y Pérez es con tilde!

[#14 eduardo.turino]

Pues señores, este hombre cuando habla la clava. No me refiero a política, que hace mucho que no le leo opinar sobre el tema. Pero recibir de vez en cuando un zas-en-toda-la-boca tan contundente como agradable de leer resulta estupendo.

[#5 giles]

#4 Hecho hecho...las prisas

[#10 MaravillosoDesgarro]

Qué articulazo y qué gusto leer a Pérez-Reverte, que el sí puede poneerlo con todas sus letras lo ignorante que somos y ¡oh sorpresa! es por elección.

[#9 tnt80]

#8 Dos cositas:

-¿si son tan obvias porqué se comenten aún las tropelías que dice?

-Lo más peligroso de este mundo es precisamente, la falta de determinación, todos acabamos diciendo "¡Bah! Ya se solucionará, armar jaleo ahora no sirve para nada" o cosas similares para simular el hecho de que tragamos como borregos. Hay que insistir, los problemas no se solucionan solos, y si hay que dar la tabarra, para que los que pueden actuar directamente sobre el problema, se vuelvan locos, u obren para solucionar el problema, se da la tabarra, pero lo pero de todo es callarse y darlas siempre por obvias.

[#3 giles]

#2 Gracias, no me había dado cuenta, corregido

[#11 Desactivado]

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[#13 Desactivado]

Al final va a pasar como en aquel colegio vasco, que la gente se queda con el "culo, teta, popó, imbécil" y "los desastres naturales son malos". Y, más gracioso aún, exigen novedad, entretemimiento o una tesis doctoral sobre una cuestión a una columna de opinión que lleva escribiéndose sin interrupción quince años.

[#12 Desactivado]

Y total, para leer los enésimos exabruptos de Reverte, qué más da. Yo de verdad lo siento, pero se me repite como el ajo con su particular "no me siento las piernas" y que todo se va al "carajo".

[#6 Desactivado]

"ARñgfs cojones, pollas, españa coño. Las cosas no son como antes. Coño joder hostia puta. Los desastres naturales son malos."

"que bueno el arturo, qué verdades dice, es un crack"

[#8 Desactivado]

Se pueden decir más obviedades, pero haría falta más sitio. Académico. Manda cojones.