Miles de personas se han concentrado en San Francisco para protestar contra la política de China hacia el Tíbet coincidiendo con el recorrido de la antorcha olímpica por las calles de la ciudad californiana. La presión de los manifestantes y el miedo a disturbios ha obligado a las autoridades estadounidenses ha reducir considerablemente el recorrido de la llama olímpica, que ya sufrió un accidentado paseo por Londres y París. Relacionada: San Francisco se blinda