La frase del Rey Juan Carlos, ¿Por qué no te callas?, unida al gesto y el abandono del recinto, encierra una lección magistral de diplomacia, cuyos términos y contexto admiten una lectura de gran trascendencia, tanto en el plano internacional ( de respeto al Estado español) como en el plano interno ( de respeto al titular de la monarquía), pero sobre todo porque sobre el tapete internacional pone el acento en la necesidad de que la cortesía y la educación son valores que deben impregnar toda sociedad democrática.
Comentarios
Veo muchos negativos por diferentes motivos, pero el artículo del blog me parece bastante acertado, y nada provocador ni amarillista. Yo lo meneo.
#3 No interesa ahora, ahora toca el circo con el que nos entretienen; el pan, mañana
yo tampoco entiendo los negativos...¿Leerán las noticias?
No voto negativo pera ya cansa el tema. Pasemos al precio de tomates y cebollas.