El sacerdote Kevin Gray ha sido formalmente acusado de apropiarse de fondos eclesiales en Connecticut por valor de 1,3 millones de dólares. Con este dinero, el clérigo de 64 años habría financiado presuntamente una vida paralela de despilfarro y gastos en servicios de prostitución masculina. De acuerdo a la Policía, Gray ha admitido su cuantioso desfalco explicando que odiaba su condición de religioso, además de reprochar que la Archidiócesis de Hartford le había dado siempre los peores destinos.
Comentarios
He leído Kevin Gay
tienes una falta de ortografia en el titular, se escribe socerdote .
no meneo al abc, que luego hace publicidad de monjas.
el cura, al menos no violó a nadie, está por encima de muchos otros curas.
Vaya asi que como estaba cabreado con su diocesis robaba para beneficiarse a jovencitos... que superiodad moral tiene la iglesia.
¡Que asco!.