Nadie está loco. No se trata de volver a los precios de la República de Weimar o a la hiperinflación latinoamericana de la década perdida. Tampoco consiste en crecimientos de los precios de dos dígitos. Es una modesta proposición de, por ejemplo, elevar del 2% al 4% la tasa de inflación máxima considerada por el Banco Central Europeo (BCE) con el objeto de estimular la economía de la eurozona, machacada por la “austeridad obsesiva”.
Por favor, no generalizar. Mejor hablar de "algunos" países latinoamericanos. Me tocó trabajar en uno durante esa "década perdida" y muchas veces la inflaciónn era negativa o cero. Ese país, Chile, creció igual y hoy es el más desarrollado de la región. Dos conclusiones: una, Latinoamérica es muy grande y no debemos generalizar y dos, no siempre se cumple la ecuación de más inflación igual a más crecimiento.
Nadie está loco. No se trata de volver a intentar las mismas gilipolleces exactamente del mismo modo. Tampoco consiste en un robo demasiado descarado. Es una modesta proposición de, por ejemplo, elevar del 2% al 4% el porcentaje máximo que el gobierno sustrae de los ahorros del contribuyente considerada por el Banco Central Europeo (BCE) con el objeto de estimular la economía de los políticos y sus amigos empresarios, machacada por la “austeridad obsesiva”.
Vaya, es que no hay que ser un puto genio para saber que ese dinero que el gobierno va a imprimir con singular alegría, va a ir a parar a la clase gobernante, como todo lo que sustrae el gobierno a la población. Pero se me olvidaba, al final no importa si lo usan los políticos y banqueros para enriquecerse, ese dinero tarde o temprano fluye a las clases más desfavorecidas, y todos contentos (especialmente los políticos). Solución anticrisis garantizada.
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Por favor, no generalizar. Mejor hablar de "algunos" países latinoamericanos. Me tocó trabajar en uno durante esa "década perdida" y muchas veces la inflaciónn era negativa o cero. Ese país, Chile, creció igual y hoy es el más desarrollado de la región. Dos conclusiones: una, Latinoamérica es muy grande y no debemos generalizar y dos, no siempre se cumple la ecuación de más inflación igual a más crecimiento.
Traducción al español:
¡Vivan los impuestos!
Nadie está loco. No se trata de volver a intentar las mismas gilipolleces exactamente del mismo modo. Tampoco consiste en un robo demasiado descarado. Es una modesta proposición de, por ejemplo, elevar del 2% al 4% el porcentaje máximo que el gobierno sustrae de los ahorros del contribuyente considerada por el Banco Central Europeo (BCE) con el objeto de estimular la economía de los políticos y sus amigos empresarios, machacada por la “austeridad obsesiva”.
Vaya, es que no hay que ser un puto genio para saber que ese dinero que el gobierno va a imprimir con singular alegría, va a ir a parar a la clase gobernante, como todo lo que sustrae el gobierno a la población. Pero se me olvidaba, al final no importa si lo usan los políticos y banqueros para enriquecerse, ese dinero tarde o temprano fluye a las clases más desfavorecidas, y todos contentos (especialmente los políticos). Solución anticrisis garantizada.