Cooperación frente a leyes duras. El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha querido zanjar su polémica migratoria con el jefe del Ejecutivo italiano, Silvio Berlusconi, aunque ha dejado bien claro que sus recetas para afrontar el fenómeno son completamente distintas.
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Cómo nos gusta ocuparnos de las casas ajenas en lugar de solucionar los problemas de la propia.
Berlusconi aconseja a Zapatero como no llevar el país a la crisis.