No se deben hacer bromas cuando han muerto 154 personas. Los periodistas deberían darse cuenta del dolor de los familiares de las víctimas y el cabreo en general que tenemos todos por lo sucedido. Creo que la ley tendría que actuar con dureza contra estas aves de rapiña que se alimentan de la desgracia ajena, sean del pais que sean, da igual, porque es intolerable que se rian a costa de los muertos.
A los familiares de los fallecidos hay que dejarlos tranquilos, porque son tan víctimas como ellos. Hay que darles ayuda médica y psicológica, para ayudarles a pasar el mal trago, aunque eso nunca se pasa del todo. ¿ No os ha ocurrido cuanto estais en un hospital, enfermo o convaleciente de alguna intervención quirúrgica, que os molesta todo y sólo quereis estar tranquilos y que nadie os moleste? Bueno, pues igual, salvando la diferencia.