Lo que pasa en Ryanair te pasará a ti también. Las multinacionales y grandes empresas hacen lo que quieren; incumplen las leyes del país, hacen que los trabajos sean más precarios y cuando hacen despidos colectivos, ni derecho a protestar te dejan porque seamos realistas: ahora no nos gobiernan Gobiernos, esos son solo marionetas de cuyos hilos tira el dinero que les paga las empresas. Estas tienen el verdadero poder. Y nosotros pobres mano de obra no tenemos para defendernos si no los números: somos muchos, pero sin unión no hay fuerza. Lo mismo que no nos decidimos si gobierna la Izquierda o la Derecha, aunque para mí no se diferencian más que en el nombre, tampoco nos unimos para parar las injusticias. Como la subida de la Luz, que ya he perdido la cuenta de cuantas veces la han subido en dos años. Tanto bien social nos ha hecho débiles, no sabemos luchar por lo nuestro, pero lo peor es que ni queremos molestarnos. Nos hemos hundido en una nube de conformidad de la que no podemos salir y en la que no tenemos visibilidad para ver cómo nos van quitando todas las libertades sociales que con mucha sangre se han conseguido en el pasado. Pero si sirve de consuelo, la Historia nos han enseñado que cuando la sociedad no aguanta más, explota. Espero que sea una explosión pacífica, civilizada, y no con sangre. Al fin y al cabo, hemos evolucionado ¿no?
Si quieren profundizar más, miren este enlace: https://www.elconfidencialdigital.com/articulo/la_voz_del_lector/quien-quiere-ser-kleenex/20190918142245131160.html
Comentarios
En realidad sí tenemos instrumentos para defendernos. Empezando por el voto (que sí sirve, siempre y cuando no votes a quienes promulgan las leyes redactadas por las multinacionales), pasando por el sindicalismo combativo (fuera los sindicatos burocráticos empotrados en el estado) o incluso por mecanismos del estado (inspección de trabajo, denuncias, etc.). Llevamos décadas perdiendo derechos y por eso las grandes empresas están envalentonadas. Hay que revertir la tendencia, y eso hay que hacerlo recurriendo a todos los instrumentos a la vez.
Políticos y grandes empresas son reflejo de los consumidores.
Por supuesto que los tenemos, pero el instrumento más importante es la unión, porque si compran a los políticos ellos son los que hacen que las leyes pasen o no y entonces necesitamos ser muchos para luchar contra ello.