Este psicomotricista en dos colegios de Elche vuelve a la escritura con un libro sobre cómo abordar emocionalmente la relación entre padres e hijos. Nos detenemos a charlar con Hendrik Vaneeckhaute (1968, Bélgica), padre de tres hijos y un reputado psicomotricista relacional y especialista en Prevención y Salud Infantil, actualmente como externo en el CEIP Princesa de Asturias y en Vida y Tierra, ambos en Elche y ambos ofreciendo una educación alternativa que tiene puesta la mirada en la emoción.
Comentarios
Sobre todo si al final no les reglas lo que querían...
Las navidades se convierten en "abrir cajas".
lo que hay dentro importa durante los 5 segundos que tardan en coger la siguiente caja
Cuantos más regalos peor, eso está claro.... Así que este año les pido a mis familiares que se dejen de gayumbos y calcetines, que yo con una tarjeta gráfica me conformo, que mi Nvidia GT 1030 me va fallando
Que se lo diga a los hijos e hijas de millonarios y multimillonarios, que tienen de todo, y como luego se aburren, van pegando palizas a quienes no piensen como ellxs...
Saludos.
Será menos placer unitario, el placer es el mismo, pero se reparte entre el número de regalos.
Pero sería interesante saber donde se produce la decepción para ajustar a esa cantidad.
¿es equivalente una PS5 a 3 cajas de lego? Igual en pasta si... pero en ilusión? Un regalo mierder no va a generar lo mismo que un regalo de PM...
va a ser más complejo que simplemente el número de regalos, creo yo vamos...
#1 ni siquiera es placer unitario. Al tercer o cuarto regalo los niños no se acuerdan de lo que han recibido. He visto cumpleaños de hata 30 regalos. Vomitivo.
"En Navidad, cuantos más regalos a los niños, menos placer les produce"
Por eso la gente súper-inteligente y súper-ética defiende que es súper-inteligente y súper-ético el hacer nacer a los hijos en la pobreza, porque en la pobreza los niños no reciben ningún regalo, y por tanto su placer es infinito.
#3 ¿Alcanzan el Nirvana o qué?
#3 te has quedado agusto, eh?