Gabriel acude a una entrevista de trabajo en el centro comercial Plaza Mar de Alicante. Cuarenta minutos después corre despavorido por el puente peatonal que sobrevuela la carretera. Zigzaguea y esquiva a los transeúntes que miran a su espalda y buscan al loco que lo persigue; pero está solo. Derrapa frente a un paso de cebra. Zanquea alrededor de un semáforo en rojo. La gente empieza a pensar que el loco es él.
Creo que he perdido 5 valiosos minutos de mi tiempo leyendo esto...
Por algún extraño motivo, otro ingeniero que se cree diferente al resto de trabajadores por su título.
Las ofertas de trabajo son una mierda para todos, sin excepciones.
La parte en la que repite, como si de algo inimaginable se tratase, de que a pesar de tener una ingeniería y muchos cursos e idiomas tiene que ir buscándose la vida echando curriculums, me ha hecho pensar que quizás tenga que hacer un curso nuevo de humildad. O es que acaso, cualquier otra persona con otra o ninguna titulación si que tiene que ir arrastrándose de esa manera, y él no...
Gabriel lo tiene muy fácil: le basta con fundar su propia empresa; arriesgar su propio capital; entramparse hasta las cejas para inciar su negocio; volverse loco rellenando papeles, solicitudes, licencias y demás; responsabilizarse de las nóminas y Seguridad Social de sus empleados; y sobre todo, cuando vaya a contratar a alguien o quiera convencer a algún inversor, decirle que su negocio (de Gabriel) es una puñetera mierda.
Primero de todo y por convenio no se paga el SMI en ese tipo de empresas.
Segundo, no hay nada bochornoso ni humillante en tener que trabajar "doblando ropa".
Tercero, si es un relato de fantasía o no el autor sabrá, pero que no trate de desquiciarse con los demás si no encuentra trabajo.
#1 Pues a mí me ha gustado y en ningún momento dice que es denigrante trabajar doblando ropa. Lo denigrante es un proceso de selección en el que tienes que aguantar a un impresentable de recursos humanos que pretende venderte la moto de que vas a trabajar en una empresa cojonuda y exigiéndote compromiso con ella pagándote una miseria durante la campaña de Navidad
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Creo que he perdido 5 valiosos minutos de mi tiempo leyendo esto...
Por algún extraño motivo, otro ingeniero que se cree diferente al resto de trabajadores por su título.
Las ofertas de trabajo son una mierda para todos, sin excepciones.
La parte en la que repite, como si de algo inimaginable se tratase, de que a pesar de tener una ingeniería y muchos cursos e idiomas tiene que ir buscándose la vida echando curriculums, me ha hecho pensar que quizás tenga que hacer un curso nuevo de humildad. O es que acaso, cualquier otra persona con otra o ninguna titulación si que tiene que ir arrastrándose de esa manera, y él no...
Mientras haya gente que se crea fuera de la clase obrera por tener un titulito seguiremos igual toda la vida.
Gabriel lo tiene muy fácil: le basta con fundar su propia empresa; arriesgar su propio capital; entramparse hasta las cejas para inciar su negocio; volverse loco rellenando papeles, solicitudes, licencias y demás; responsabilizarse de las nóminas y Seguridad Social de sus empleados; y sobre todo, cuando vaya a contratar a alguien o quiera convencer a algún inversor, decirle que su negocio (de Gabriel) es una puñetera mierda.
Erroneo.
Primero de todo y por convenio no se paga el SMI en ese tipo de empresas.
Segundo, no hay nada bochornoso ni humillante en tener que trabajar "doblando ropa".
Tercero, si es un relato de fantasía o no el autor sabrá, pero que no trate de desquiciarse con los demás si no encuentra trabajo.
Para la siguiente que se trabaje mejor el texto.
#1 Pues a mí me ha gustado y en ningún momento dice que es denigrante trabajar doblando ropa. Lo denigrante es un proceso de selección en el que tienes que aguantar a un impresentable de recursos humanos que pretende venderte la moto de que vas a trabajar en una empresa cojonuda y exigiéndote compromiso con ella pagándote una miseria durante la campaña de Navidad
De ingeniero a ingeniero: bienvenido a la realidad, pringao! Sal de tu matrix particular, y date de hostias con la realidad
- Yo es que habiendo estudiado una ingeniería no trabajo por menos de 2000€ (hace 5 años eran 3000€)
La de veces que he escuchado esa frase.