El miedo ha sido desde siempre un arma de control efectiva, incluso en el ámbito doméstico. Es también una herramienta de aprendizaje que cristaliza en personajes escalofriantes. El Coco enseña a los niños a dormir a su hora; el Hombre del saco, a volver a casa antes de que caiga la noche; y el Lobo feroz, a no fiarse de extraños. Los niños los temen, pero los adultos delegan en su persona (o personaje) una función pedagógica. Para eso han quedado los monstruos, no tanto para asustar como para educarnos y controlarnos.
Comentarios
Pues a mí me enseñó lo que es "cerca" y "lejos".
Con tal de que alguien me coma algo...
En todas las mitologias hay alguno.
- El "Namahage" japones por ejemplo seria un equivalente. Es un oni que aparece en año nuevo preguntando si hay algun niño malo que merezca ser castigado. Con el tema de los bosques, lobos y extraños estarian los Kodama, okami.. .etc.
Ya que he metido el pie, aprovecho un poco;
A ese respecto los japoneses son interesantes, tienen multitud de "onis" (pueden ser malvados, benevolos o cualquier cosa, el termino de demonio es occidental) que surgieron para disuadir o dirigir la conducta de la poblacion.
Las "Kijo" por ejemplo, como quizas os suene "Kiyohime", son los espiritus de las mujeres traicionadas o maltratadas que vuelven para vengarse.
Los "Tsukumogami" son los espiritus que adquieren los objetos viejos, una forma (en desuso claro) de cultivar la longevidad de los objetos.
Pablo Iglesias y Podemos.
Duérmete Pedro
duérmete ya,
que viene Pablo
y te comerá.