El sindicato AFE ya ha reivindicado que entiende la protesta como un ejercicio de libertad de expresión y en ningún caso como una huelga. Los hechos ocurrieron en la 9ª jornada de LaLiga cuando, en plena polémica por la disputa del Villarreal-Barça en Miami, los capitanes de Primera pactaron no disputar los segundos iniciales de cada partido en señal de protesta. Se quejaban de que LaLiga no les había informado con detalle de este proyecto y de la decisión se había tomado, por tanto, sin tener en cuenta a los jugadores.