Francisco Antonio M. J. tenía 51 años y dormía en una furgoneta que había aparcado hace apenas unos días en un descampado del madrileño Barrio del Pilar, justo en la intersección de las calles Monforte de Lemos y Ganapanes. El vehículo era suyo y últimamente permitía a Miguel Ángel S. M., que apenas tenía un año más que él, pernoctar junto a él en el improvisado colchón que habían tendido en el suelo. Ambos se calentaban con una estufa de gas butano antigua, de las que tienen el tamaño de la propia bombona, que al parecer terminó siendo (...)
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#0 Trágico, aunque creo que duplicada Mueren dos hombres en una furgoneta intoxicados por una mala combustión de una estufa
Mueren dos hombres en una furgoneta intoxicados po...
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