La cabeza, el pecho y el abdomen del guerrero enterrado habían sido mutilados durante el período ávaro, y solo los brazos y los huesos de la parte inferior del cuerpo permanecieron en orden anatómico. Sin embargo, a los autores no les interesaban el sable, las puntas de flecha , el cuchillo largo que quizá también se usó como arma, ni los accesorios de plata del cinturón, las trenzas doradas y los pendientes de cuentas de vidrio del hombre; los dejaron todos en la tumba, algunos intactos y sin moverlos.

Los expertos sugieren que la armadura pudo haber pertenecido a un soldado o comandante de élite destinado en Rustavi. El casco de hierro, con una placa protectora desmontable, refleja una artesanía y un diseño avanzados, posiblemente influenciados por modelos bizantinos o persas. La cota de malla, compuesta por miles de anillos de hierro entrelazados, se encuentra en un estado excepcional, considerando la humedad del suelo de la zona.

Un sistema de túneles tallados en la toba del Nahal ‘Amal, datado en los siglos XIV y XV, evidencia el uso de agua salobre para generar energía mecánica, redefiniendo el paisaje industrial medieval del valle de Bet She’an. A diferencia de los acueductos abiertos, comunes en el periodo romano y bizantino, esta red es subterránea, adaptación crucial a las particulares condiciones geológicas del valle y a la naturaleza salina de los manantiales locales, cuyo caudal era estable pero no apto para el consumo o el riego extensivo.

Washingtonia fue una efímera colonia establecida por refugiados cuyas vidas habían sido destrozadas durante la Guerra de Independencia Griega, que duró de 1821 a 1829. Fue un experimento del utopismo del siglo XIX, nacido en los primeros años del estado griego. La misión la encabezó un estadounidense, Samuel Gridley Howe, cuyo país había obtenido su independencia sólo unas décadas antes. Guiado por el optimismo, llamó Washingtonia a su colonia en honor al primer presidente. La colonia sería autosuficiente y para ello recibió 8 Km²