El libro se basa más o menos en esta premisa: «Hace años que no mato a nadie, y no pienso volver a hacerlo nunca más. Fue solo una mala racha que estaba pasando.»"
Luego, el segundo pilar, es su odio al mar y a las mujeres. No me voy a molestar en explicar por qué. Da igual.
Casi todo da igual, o esa es la sensación que me queda. Porque se trata de un adolescente psicópata que ha matado a dos primos y a un hermano, y que piensa que lo más divertido de la vida es portarse como una mierda y conseguir que todo el mundo se desviva por ti.
Me acerqué al libro con ciertas reservas, porque todo lo que va sobre maniáticos y psicópatas da ocasión a decir gilipolleces sin necesidad de justificarlas, y salí de él con esa misma impresión: que el autor tenía ganas de escribir maldades ode ahorrarse un psicólogo y compuso esta novela que, seguramente, sería muy provechosa para él, pero no tanto para sus lectores. O así lo veo yo.
No obstante, reconozco que está mejor escrita que la media y que gran parte del desagrado viene de que no me gustan las novelas sobre adolescentes (no, tampoco el guardián en el centeno, ni el señor de las moscas) y tampoco las que se basaban en universos mentales con reglas propias, y rituales propios, como la fábrica de avispas, sus altares de sacrificios y sus chorradas diversas. Prefiero elfos y dragones. Me los creo más. O me aburren menos.
Un asco de novela, pero que puede interesar a los aficionados a estas malas digestiones mentales.
Comentarios
Pues a mí me gustó mucho; sin ser una obra maestra me resultó entretenida y muy original (excepto las torturas de animales, que son espeluznantes). El ambiente es claustrofóbico en la isla y la familia repulsiva, pero el goteo de sucesos del pasado muy medido y la calidad del texto te empuja a leer hasta el final de una sentada (y sin caer en spoilers, decir que el giro final no lo ves venir) Comentar también que el escritor es el mismo Banks de la serie de CF de La Cultura
Qué perecita me da el género "psicópata psicopatea". Dragón Rojo (y el Silencio de los Corderos) fue, si no el primero, sí el más conocido en romper el tópico anterior de que los psicópatas son deficientes mentales y llevarlo al otro extremo, psicópatas inteligentes, metódicos, hasta cierto punto refinados y con intelecto. Y el antitópico se convirtió en el nuevo tópico.
Jeje, precisamente tengo el guardian entre el centeno y el señor de las moscas a medio leer porque se me hacian aburridas, especialmente la primera...
La fábrica de avispas es una mierda. Ahora, cuando Banks escribe ci fi se coloca entre los grandes. Ojito.