A Dina Babbitt pintar le salvó la vida. Y la de su madre. Sobrevivió al infierno mostrando estampas de cuentos infantiles, arrancando sonrisas a los más pequeños. Años después intentó recuperar algunos de sus dibujos, sin lograrlo. Esta es su historia.
Comentarios
Pues si se llega enterar Hitler con lo que le gustaban los dibujos
https://www.elcorreo.com/bizkaia/sociedad/201501/13/sensibilidad-oculta-hitler-20150112142156.html