Desde pequeños recibimos información que va conformando nuestro sistema de creencias, nuestros valores, la forma en que interpretamos el mundo que nos rodea y también cómo nos percibimos cómo nos significamos y/o valoramos a nosotros mismos. Aprendemos que algunas conductas se consideran “buenas” (aceptables para la sociedad) y otras “malas” (rechazables). Toda sociedad instrumenta sistemas de disuasión para evitar que hagamos aquello que desaprueba...
Comentarios
SPAM.
que se lo pregunten a rajoy
Yo tengo miedo a entrar en el armario. A saber en que tipo de mundo puedo acabar.
Si es como salir del nórdico en invierno es más que comprensible.