Hoy en día vemos como las redes sociales se están apoderando más y más de las nuevas estrategias de mercado. La mayor parte de las empresas utilizan los nuevos sistemas y las redes como forma y/o plataforma comercial para generar vínculos entre las empresas y los clientes. Esta práctica es muy común y a la que podemos denominar como comercio electrónico o e-commerce.
Por si aún no te ha quedad claro que es el e-commerce o no tienes muchas nociones sobre este concepto, podemos definirlo de la siguiente manera: “el e-commerce (electronic commerce) es el proceso de compra y venta de productos y servicios que realiza una empresa o negocio a través de los diversos medios electrónicos o herramientas electrónicas disponibles en la red.
Se podría decir que este proceso o herramienta que utilizan las empresa ayudan a mejorar la distribución de los productos en un mercado digital cada vez más interactivo que busca productos de menor costo y tener así una mayor comodidad de adquisición de los productos, ya que no tendría que desplazarse a una tienda física.
El e-commerce no es un proceso sencillo. Necesita de un seguimiento desde la preventa, pasando por el marketing y la publicidad, hasta llegar al proceso final de compra en dónde se construye una base de datos de los clientes. Esto nos permite diseñar los KPI’s y trabajar el ROI por acción, por campaña y por estrategia.
Dentro del e-commerce podemos hablar de varias perspectivas:
- La perspectiva del servicio y de la comunicación, en dónde se tiene un contacto con el cliente, existe un intercambio de productos y además un pago a través de los diferentes medios virtuales o telefónicos.
- La perspectiva del negocio, en dónde la penetración e inserción de la tecnología y del comercio electrónico consigue avanzar en los procesos de comercialización del producto o servicio ofrecido.
Las empresas deben mantener un talento humano de alto nivel para cada uno de estos procesos, pues es una de las partes más importantes, sin dudar de que el comercio electrónico es mucho más que el proceso de compra, sino la utilización de todas las herramientas posibles para garantizar la seguridad de los clientes.