Si somos sinceros con nosotros mismos y buscamos ser fieles a los valores de la Iglesia Católica, llegaremos a la conclusión de que el Halloween no tiene nada que ver con nuestro recuerdo cristiano de los Fieles Difuntos, y que todas sus connotaciones son nocivas y contrarias a los principios elementales de nuestra fe.
¿no estamos promoviendo en la conciencia de los pequeños que el mal y el demonio son solo fantasías, un mundo irreal que nada tiene que ver con nuestras vidas y que por lo tanto no nos afectan?
En efecto, a algunos no nos gusta educar en el miedo
Si aceptamos todas estas ideas y las tomamos a la ligera en "aras de la diversión de los niños" ¿Qué diremos a los jóvenes (a quienes durante su infancia les permitimos jugar al Halloween) cuando acudan a los brujos, hechiceros, médiums, y los que leen las cartas y todas esas actividades contrarias a lo que nos enseña la Biblia?
Me encanta la forma que tienen los magufos cristianos de sentirse superiores al resto de magufos. Nosotros somos la religión verdadera porque la biblia, al contrario que las supersticiones, cuenta historias verosímiles y lógicas
Dice: Si somos sinceros con nosotros mismos y buscamos ser fieles a los valores de la Iglesia Católica
Una premisa dirigida a los fieles cristianos no tiene porque afectar al resto de la población. Católicos auténticos, es decir practicantes, cada vez hay menos. No me refiero a los que se apuntan a las celebraciones festivas de La Iglesia, por pura afición al jolgorio. Sino a los que van a misa todos los domingos, y aceptan todas las doctrinas vaticanas, etc.
Me molestan los fanáticos que mean fuera del tiesto contínuamente, así no es de extrañar que cuando surge una fiesta no cristiana, se meen en ella. En el pasado se fueron cargando todas las fiestas paganas una a una para apuntalar el pensamiento único católico en la población con la ayuda del estado.
Lo hicieron o bien prohibiéndolas o cristianizándolas. Veinte siglos de dominación católica, que intentan continuar en democracia mediante concordatos bastardos, firmados por el estado. Un estado hipócrita que se hace denominar aconfesional mientras paga con los impuestos la educación católica.
¿Cuántas fiestas cristianas tenemos que tolerar los ateos y los paganos para que los católicos toleren el Halloween, el Carnaval, y alguna otra fetividad superviviente?
Si no les gusta el Hallowen, razón de más para celebrarlo.
Comentarios
¿no estamos promoviendo en la conciencia de los pequeños que el mal y el demonio son solo fantasías, un mundo irreal que nada tiene que ver con nuestras vidas y que por lo tanto no nos afectan?
En efecto, a algunos no nos gusta educar en el miedo
como les fastidia a los catolicos estos que se vaya de fiesta por los muertos en vez de a misa los domingos
Si aceptamos todas estas ideas y las tomamos a la ligera en "aras de la diversión de los niños" ¿Qué diremos a los jóvenes (a quienes durante su infancia les permitimos jugar al Halloween) cuando acudan a los brujos, hechiceros, médiums, y los que leen las cartas y todas esas actividades contrarias a lo que nos enseña la Biblia?
Me encanta la forma que tienen los magufos cristianos de sentirse superiores al resto de magufos. Nosotros somos la religión verdadera porque la biblia, al contrario que las supersticiones, cuenta historias verosímiles y lógicas
Dice: Si somos sinceros con nosotros mismos y buscamos ser fieles a los valores de la Iglesia Católica
Una premisa dirigida a los fieles cristianos no tiene porque afectar al resto de la población. Católicos auténticos, es decir practicantes, cada vez hay menos. No me refiero a los que se apuntan a las celebraciones festivas de La Iglesia, por pura afición al jolgorio. Sino a los que van a misa todos los domingos, y aceptan todas las doctrinas vaticanas, etc.
Me molestan los fanáticos que mean fuera del tiesto contínuamente, así no es de extrañar que cuando surge una fiesta no cristiana, se meen en ella. En el pasado se fueron cargando todas las fiestas paganas una a una para apuntalar el pensamiento único católico en la población con la ayuda del estado.
Lo hicieron o bien prohibiéndolas o cristianizándolas. Veinte siglos de dominación católica, que intentan continuar en democracia mediante concordatos bastardos, firmados por el estado. Un estado hipócrita que se hace denominar aconfesional mientras paga con los impuestos la educación católica.
¿Cuántas fiestas cristianas tenemos que tolerar los ateos y los paganos para que los católicos toleren el Halloween, el Carnaval, y alguna otra fetividad superviviente?
Si no les gusta el Hallowen, razón de más para celebrarlo.
Ahh! vosotros los que votais negativo, HEREJES!!!, pero Dios os lo tendra en cuenta...