En un mercado globalizado, altamente competitivo, con tasas de paro a la baja que se aproximan al pleno empleo y con nuevos profesionales cada vez más cualificados, se hace necesario que los sistemas de gestión de nuestras empresas exploren fórmulas y herramientas capaces de retener a las personas con talento, pues ellas son el activo más valioso de la estructura empresarial y económica mundial.