Y no uno, ni dos... sino nueve menores, sino nueve menores, que se encontraban fugados de los centros de menores que los acogen. Se fugaron para ir a los bailes del carnaval de Santa Cruz de Tenerife. Y fueron encontrados en el Hospital del Carnaval, con signos extremos de embriaguez, dicho finamente, o borrachos como una cuba, para que todos nos entendamos.
Comentarios
#0 Te repites en la entradilla en la entradilla
#2 Es que eran 18, 18.
cualquiera tiene derecho a divertirse...
A eso se le llama rehabilitación