Una parte considerable de los monumentos históricos musulmanes que existen en el recinto de la ciudad antigua de Jerusalén se están echando a perder rápidamente sin que Israel permita a los palestinos realizar las tareas de mantenimiento y conservación imprescindibles. El inexorable deterioro se observa por todas partes en el barrio musulmán.
Comentarios
¿Algún día les dejaran respirar sin mirarles mal? Es para fliparla.