Sí, yo formo parte de un sistema de castas existente en el mundo universitario. En mi post ‘Yo he costado 230.000 euros a todos los españoles’ hubo muchas personas que aparte de quedarse con el dato de lo que valen los licenciados con máster, hicieron comentarios que dejaron traslucir que se desconoce en general el funcionamiento del sistema universitario durante la última década. Así que voy a explicar por qué afirmo en mi primera frase que soy una paria en la Universidad junto a muchos de mis compañeros
Comentarios
pero cuando las Universidades se colapsen por falta de personal, ese grupo invisible que hacía tantas cosas, alguien dirá: ¿no había unos parias que hacían todo esto? ¿dónde están? Y ya habremos emigrado o comenzado a trabajar en algún burguer.
Es entonces cuando jóvenes de treinta y pocos con apellidos rimbombantes se harán con las cátedras.
Me estaba acordando de un vídeo que vi hace un par de años... y lo he encontrado:
Vamos, un resumen en versión musical de la pura realidad de la mayoría de estudiantes de doctorado en España.
#4 Magnífico !!!!!
pero cuando las Universidades se colapsen por falta de personal, ese grupo invisible que hacía tantas cosas, alguien dirá: ¿no había unos parias que hacían todo esto? ¿dónde están? Y ya habremos emigrado o comenzado a trabajar en algún burguer.
ERROR: ¿porqué crees que las universidades están colapsadas y cada año salen miles y miles de licenciados? Precisamente para que "cualquiera" de esos pueda hacer "ese" trabajo, y quitarle toda la importancia a lo que tú haces. Por eso yo ni me planteé hacer un simple doctorado a pesar de ser de los mejores de mi generación, me di cuenta en seguida que era una pérdida de tiempo, y no me sobraba el dinero ni el tiempo precisamente. No solo se pierde gente válida que deja de investigar, muchos ni siquiera lo intentamos o lo podemos intentar.
#2 El doctorado es algo muy serio que una persona debe decidir de acuerdo a sus aspiraciones profesionales. Realmente el doctorado no se trata de "seguir estudiando" o de "querer ser profesor", porque no es ese el objetivo de un doctorado. Un doctorado se hace cuando uno desea realmente dedicarse a la investigación científica porque sus aspiraciones van por ahí en lugar de ir por otro camino, como puede ser el camino comercial, el de la empresa privada o el del "emprendedurismo" (todas ellas opciones igual de válidas y respetables, unas y otras).
Así pues, lo que dices que es "una pérdida de tiempo", evidentemente lo sería para ti, puesto que está claro que tus inquietudes y tus aspiraciones profesionales no se dirigían hacia la investigación. Tomaste una buena decisión, puesto que el doctorado no es un camino de rosas donde todo son oportunidades y buena vida; hay que currárselo (y mucho) para llegar a ser un buen investigador y, la mayoría de veces, de postre, te toca lidiar con todo tipo de cerdos vividores que han hecho del departamento, el instituto o la facultad su coto privado, con lo cual te encuentras en el caso de que tu valía profesional no sirve para nada en un mundo generalmente poblado de mamones. Has de ser muy bueno y tener suerte con tus jefes para poder vivir como científico investigador. O eso o te conviertes en mamón y te pones a la cola a esperar a que llegue tu turno en el reparto de cómodas placitas en la universidad de tu ciudad (opción elegida por más "investigadores" de los que la gente de a pie se imagina). Lástima para estos últimos que España ahora mismo no está precisamente tirando la casa por la ventana en cuestión de plazas públicas de investigador. Una pena para ellos.
Sin embargo, y obviando el cruel mundo de las castas universitarias, dada la complejidad y las dificultades en materia de esfuerzo intelectual que implica dedicarse profesionalmente a la investigación científica, esto es llegar a trabajar en los sitios donde se desarrollan los materiales del futuro o las teorías que nos permitirán en unas décadas comprender un poco mejor el Universo o disponer de nuevas tecnologías aplicables a infinidad de campos como la industria metalúrgica o la Medicina, hasta hace relativamente poco tiempo eran pocos, muy pocos, los que optaban por hacer un doctorado y dedicar sus vidas a la investigación. Y normalmente eran gente con una grandísima vocación, realmente volcados en su trabajo y con un hambre de conocimientos que pocas personas serían capaces de comprender. Eso ahora mismo ya no es tan así, especialmente en España.
Ahora mismo tenemos miles de jóvenes españoles que, acabada su licenciatura en , se dan cuenta de que sencillamente no tienen cabida en el mercado laboral. Nadie les va a pagar miles de euros al mes (ni cientos tampoco) porque trabajen de aquello que han estudiado. Se siente, pero no hay industria en España, ni tecnológica ni química ni médica. Y entonces, puesto que llevan toda la vida estudiando y las becas doctorales (al menos las de los últimos 10 años) te daban para vivir, pues se metían a hacer el doctorado, "por no estar parados". Orgullo de sus padres y, además, a ver si al final cae un puestecito en la Universidad (les cae por normal general a los mamones, dejémonos de rodeos y de estupideces, en España y en otros países de Europa donde el mamoneo y el apadrinamiento es la moneda de cambio habitual en el mundillo universitario).
Y todo esto desemboca en miles de personas como esta chica, que sintiéndolo mucho, no me da la más mínima lástima. No es que me regocije en su situación, ni muchísimo menos, pero tampoco es que me parezca nada grave e inhumano. Simplemente se ha equivocado al pensar lo mismo que muchos otros jóvenes, que el doctorado era como una especie de "curso" que había que hacer antes de presentarte a la placita de profe de la uni. Pues va a ser que no. Va a ser que era algo así como hacerte cura o guardia civil o soldado de élite, que si realmente te gusta y sientes que es lo que quieres hacer y estás capacitado para ello, lo haces y si no, pues te pones a buscarte la vida por otro sitio en lugar de ir al instituto a que el catedrático te vaya diciendo cada día lo que tienes que hacer sin tener que pensar tú demasiado, esperando a que el mundo te devuelva esa especie de deuda contraída contigo por las muchas horas que has pasado aprendiéndote cosas de memoria.
Y hay muchísima gente por ahí fuera que no llevan 2 años en el extranjero, sino que llevan 6 y 10. Y se ganan la vida (y muy bien ganada) investigando y desarrollando en instituciones como el MIT, Harvard, el CERN o la ESA, tras haber pasado por multitud de proyectos con empresas y universidades de todo tipo, no simplemente "haciendo de profe en la uni". Yo, sinceramente, preferiría que fuese uno de estos quien terminase dándole clase a mis hijos en el caso de que fueran universitarios antes que la enésima doctora local que consiguió el puestecito de profesora "porque estudió mucho". Para qué vamos a engañarnos, lo preferiría pero cien millones de veces.
#3 Imposible decirlo más claro. Enhorabuena.
#3 Más o menos de acuerdo.
Me explico. La carrera profesional-investigadora en España está mal enfocada (bueno, realmente no es ahora tanto así, pero casi). En España, por lo que yo he visto, en el doctorado te encuentras gente muy buena y gente mediocre (de esas que, como no tengo nada que hacer, pues hago el doctorado). Y mi experiencia me dice que es esa gente mediocre, la que no destaca en nada, la que al final consigue las pocas plazas que existen. ¿Por qué? Porque nunca cuestionan nada, nunca discuten nada, hacen lo que les dice el catedrático de turno y listo. No tienen iniciativa, no son capaces de hacer nada por sí solos, etc.
La gente buena, en cuanto puede y sus circunstancias lo permiten, escapa de la universidad española endogámica, caciquil y con un mal diseño de carrera profesional (donde se ven plazas en las que puntua hasta el hecho de estar dando clase o vinculado a la universidad de la plaza, cerrando opciones a buenos investigadores y profesores, pero que no son de la casa).
Una anécdota que puede ilustrar esto es que al principio cuando se comenzó a pedir las acreditaciones a profesor y todo eso (que no me parece un mal método) una de las exigencias era haber estado desvinculado de la universidad de origen o de la universidad a la que pretendieses acceder un par de años. Esa cláusula desapareció mágicamente de una convocatoria a otra (la razón supongo que la podéis imaginar, era una forma de tratar de evitar la endogamia, no muy perfecta, pero algo servía).
A ver alguno lee esto y deja de decir estupideces acerca del sistema de captación de profesores en la universidades españolas. No es tan fácil que se produzca un enchufismo descarado, al menos entre los jóvenes. Se puede hacer, por supuesto, pero esto no es lo que era. Hacen falta unos mínimos bastante elevados para conseguir una mierda de contrato indefinido, que ni es funcionariado ni nada. Que se lo digan a los Ramón y Cajal. Por otro lado, hay dos tipos de profesores ahora mismo: los que entraron en los hasta la década de los 90 (funcionarios, muchos apoltronados y sin méritos) y los de después.
#7 La famosa cláusula de "expulsión" era bastante injusta y estúpida. La "endogamia" iba a seguir sucediendo igualmente, se contrataría al candidato de la casa al cabo de esos dos años y listo. Además, podías irte a otra universidad (la de al lado) y luego volver. No es así como se arregla este tema, sino más bien modernizando las estructuras y dando más puestos de trabajos (un poco de competición en salarios y puestos no vendría mal). Échale un ojo a esto: http://pseudopodo.wordpress.com/2011/09/26/el-juego-del-catedratico/
#8 Esa es tu opinión. Ya he dicho que no era perfecta, pero algo sí servía.
Y no me vengas contando cómo se seleccionan profesores universitarios que bien lo sé. Está claro que ahora hay que demostrar unos mínimos pero aún así dista mucho de asemejarse a otros sistemas. Siguen primando al candidato de la "casa" con cláusulas como la comentada arriba de la docencia. Y si no tienes la "suerte" de tener a alguien dentro no entras ni de coña por muy buen currículum que tengas (excepto en departamentos "faltos de personal de la casa" o en universidades más o menos serias, que alguna existe).
Que nuestro sistema no es malo del todo estoy de acuerdo, pero que hay mucho que mejorar también. Que aquí parece que todo el sistema educativo es una panacea y no hay que tocar nada porque todo funciona perfectamente (y no, no digo que las reformas de este gobierno sean en la dirección correcta).
Si yo fuese dictador, eliminaría todas la Universidades, así esta chica no se sentiría mal. Es la única solución.