En 1984, Jaume Sisa, harto de todo, pero principalmente de Barcelona y sus “convergentes” circunstancias, se exhumaba en público mediante una exposición, un libro y un último disco (“Transcantautor última notícia”). Parecía el fin, pero en una penúltima (con él nunca se sabe) pirueta reaparecía en Madrid dos años después acompañando a Joaquín Sabina en la grabación en directo del disco “Joaquín Sabina y Viceversa”. Allí, Sisa había pasado a ser Ricardo Solfa...
Comentarios
Si la gente hiciese contigo lo mismo cada vez que no está de acuerdo con una opinión tuya te pasarías el día en la ducha.
No ardo muy a menudo y si ardo y voy a la ducha no haría falta que nadie me mease.
Creo más bien que no sabes qué cojones estás diciendo, #2
#3 Tan amable como en #1.
Más bien como siempre...
Que no cuenten conmigo ni para mearle encima si está ardiendo.
Buscad sus divertidas opiniones sobre la 'piratería' y la SGAE. Yo voy a merendar.