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Menéame, desde que Gallir perdió el pulso con la brigada de trolls sectarios que Pepiño alimentaba en su covachuela de Los Genoveses, se ha convertido en un arma propagandística de la izmierda zapateril.Todas las noticias sobre el PP y el centro derecha son sistemáticamente votadas negativamente, o ridiculizadas. Entre las fuentes más exitosas están el País, Público, el Plural, y blogs de la órbita. Cualquiera que haga un comentario contra la corriente izmierdista es castigado severamente para echarlo del lugar ¿Qué agregador ni qué gaitas es una web donde un grupo de privilegiados puede hundir con un calibre Karma 20 cualquier cosa que no le guste? Así, que si quieres sobrevivir manda noticias de ciencia o de humor y cállate en los comentarios políticos porque de lo contrario el escuadrón siniestro te machacará. Y lo peor es que muchos meneístas no pertenecientes a esa mafia, si quieren progresar deben adaptarse al ambiente general y, como conversos,atizan también lo suyo en la creencia de que se salvarán.

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Todavía hay quien considera a Enric Sopena un periodista. No es noticia, sino propaganda sectaria emitida por un medio sectario.