Kieron Dyer se despertó con la esperanza de no encontrar a sus hijos desayunando en la cocina. Sabía que el suceso acaecido hacía apenas 18 horas le impediría mirarlos sin sentir vergüenza, consciente de que los periódicos deportivos abrirían con su figura enzarzada en una pelea con Lee Bowyer. Dyer pretendía, ingenuo, que sus hijos no vieran la bochornosa riña entre dos compañeros de equipo, pero estaba seguro que su mujer, atónita, no habría podido apagar el televisor a tiempo.
Nottingham es, por razones obvias, una de las ciudades inglesas en la que más tradición futbolística hay. Amén de su indiscutible vinculo con Robin Hood, esta ciudad es conocida por albergar dos de los equipos de fútbol más antiguos del mundo: el Notts County y el Nottingham Forest. Cabe recordar que el Forest puso la ciudad en el mapa europeo a finales de los 70 gracias a a sus sonados triunfos en la Copa de Europa. Por todos estos motivos, en cuanto conocen mi gusto por el fútbol, los habitantes de esta pequeña ciudad no dudan en revelarme...