Frente al actual modelo alimentario, insalubre, injusto y despilfarrador de recursos, ¿por qué no intentamos ponernos, como consumidores, de acuerdo con los productores locales para trabajar juntos?

Clara y concisa explicación para entender por qué las decisiones económicas deben ser tomadas por el conjunto de la población y no por una élite de técnicos expertos. Artículo de Juan Torres López, catedrático de economía.

“Con los bonos atados al PIB se comparte el riesgo, lo que creo es un ingrediente muy importante. Hay una tendencia a culpar a quién solicita el préstamo por los problemas de deuda pero lo que tenemos que recordar es que cada préstamo, tiene dos partes: el que presta y el que recibe y ambas partes se obligan de manera voluntaria, por lo que deberíamos culpar al prestamista y al prestatario de manera igual.” Stiglitz

Supone un 8% más que en 2010. El director del estudio, realizado por el Observatorio de la RSC, Carlos Cordero, ha explicado que "desde el inicio de la crisis, en vez de decrecer la presencia de las empresas españolas en paraísos fiscales ha aumentado muy significativamente". Además son "muy pocas" las empresas que siguen los principios rectores de Naciones Unidas sobre empresas y derechos humanos.

"Desde 2007, Wall Street ha desalojado a cuatro millones de familias –aproximadamente diez millones de personas– de sus casas. Millones de personas más están atrapados en actuales embargos. Durante el año pasado he oído las historias de cientos de esas familias y la experiencia es un sentimiento de inseguridad y de terror psicológico." Ahora los banqueros de Wall Street están resucitando las mismas armas que usaron hace sólo unos años.

“La extensión de las energías renovables es la única forma de tener una generación eléctrica distribuida e independiente de los oligopolios energéticos (gas, petróleo, nuclear, carbón). (...) Depende en gran parte de nosotros que estas nuevas formas de hacer las cosas puedan desarrollarse o en cambio permanecer pasivos en este mismo paradigma destructor en el que nos encontramos.”

"Esta chusma que nos gobierna -aquí y fuera- tiene el cuajo de pedir austeridad, de recortar servicios esenciales, de ver a gente que por su culpa pasa hambre, a quienes se les niega la sanidad… mientras permiten que se evadan billones de euros y dólares sin costo alguno. Un tercio de la riqueza mundial se guarda en paraísos fiscales y el 50% del comercio ocurre allí. ¿cómo es que esta información no está copando las aperturas de los informativos de todo el mundo?"

Los conflictos de intereses ocultos en las instituciones europeas pasan desapercibidos entre la lejanía de estas y su apariencia de seriedad. Las corporaciones controlan sus entresijos porque los beneficios no tienen por qué coincidir con la salud pública.

Nuestro futuro se ve amenazado por la disminución de recursos energéticos de origen fósil y a la vez por las consecuencias de su uso. Pero el verdadero problema está en el modelo económico que gestiona los recursos y en los valores a los que sirve su diseño. Estamos alienados por una tiranía cuantitativa en detrimento de la realidad intangible que nos hace humanos. Sin cambiar la política concebida para la explotación no podrá resolverse tampoco la crisis ecológica.

La política que favorece el crecimiento del mercado, con su inherente desigualdad, exige un aumento sin sentido del consumo de energía y nos consume a nosotros mismos como simple energía para alimentarlo. Se nos impone una ambición económica que anula nuestra verdadera individualidad. Nos hemos adaptado a un funcionamiento contranatura, alejado de cualquier idea de plenitud, y que en el fondo conduce a la apatía y a la frustración además de degradar del medio ambiente.

La sociedad de mercado fuerza a realizar una cantidad de trabajo que va mucho más allá de lo necesario para el sostenimiento de su población, y a pesar de ello siguen abundando la miseria, el paro y las condiciones laborales penosas. La oferta de nuevo trabajo se convierte en la excusa inapelable para cualquier tropelía ambiental o para cualquier expolio. Una sostenida escasez parcial de trabajo, en la que cualquiere puede caer, fuerza paradógicamente un exceso del mismo. ¿Soluciones?

Desvelando las claves de la irracionalidad económica, ecológica y social que nos gobierna. Una entrada llena de frases certeras que se quedan rondando en la cabeza. Releo. Ojalá lo hiciera todo el mundo. Difundo.