#7 Ambos, he sido un niño grande y de pequeño fui un acosador (aunque no era muy cabrón). Después desarrollé empatía y quise ser un bonachón. La gente se aprovechó de mí junto a alguna gilipollez me jodieron la secundaria. Mi gran tamaño me evitó agresiones físicas pero fue muy duro.
#29 Aunque se hable de costos, no sería recomendable ofrecer dinero a los padres e acogida, lo mejor son facilidades o al menos ofrecerles reducir los gastos.