Vaya, pues yo tenía entendido que buena parte de la expresividad de un perro está en su cola y orejas. Al menos en el mio es muy sencillo saber que está contento porque, por ejemplo, su cola se mueve como las aspas de un helicóptero.
Pero entiendo que a veces eso resulte complicado, como en el caso de todos esos cretinos y cretinas que amputan colas y orejas por estúpidos motivos estéticos. Aunque la verdad es que en casos así me cuesta mucho creer que a esa persona le importe el bienestar de su desgraciado compañero canino.
#3, ¿por qué hay que poner otro título si en realidad las dos películas tienen nombres distintos y las respectivas historias se parecen bastante menos que un huevo a una castaña? Estoy seguro que no hay lugar a confusión