En la mitología romana Plutón era el dios del inframundo. Su equivalente griego era el temible Hades y no debemos confundirlo con Pluto, el dios griego de la riqueza y la abundancia.(...)Según los astrónomos del Observatorio Lowell, la propuesta del nombre de Plutón gustó especialmente porque las dos primeras letras se correspondían con las iniciales de Percival Lowell, fundador del Observatorio donde se descubrió, y también porque el símbolo astronómico era un monograma de las letras PL.
Alexander “Sasha” Shulgin fue lo que popularmente denominaríamos “todo un personaje”. (...) Shulgin empezó a diseñar y a probar en sí mismo, en su esposa y en unos pocos amigos, que incluían dos psicólogos y otro químico y que él llamaba su grupo de investigación, distintos compuestos psicoactivos. Fue el descubridor de casi doscientas moléculas capaces de alterar la mente.
Rita Levi-Montalcini nació en Turin el 22 de abril de 1909 junto con su hermana gemela Paola. Adamo Levi, su padre, era ingeniero eléctrico y matemático y Adele Montalcini, su madre, pintora. Los dos eran judíos de familias que podían trazar sus raíces en Italia desde el Imperio Romano. Según las costumbres de la época el padre desanimó a sus hijas de estudiar una carrera, temiendo que pudiese interferir en lo que era el futuro que se esperaba de ellas, ser esposas y madres.
En medio del panorama político y social que estamos sufriendo, podría parecer que ya estamos preparados para escuchar cualquier barbaridad sin alterarnos. Pero no, todavía hay personas con la capacidad de sorprendernos. Una es la autora de este panfleto populista.
La física observacional es la hermana pequeña de la física experimental y de la física teórica. No por ello es menos importante. Apoyada en la física computacional y en la física teórica nos permite descubrir nuevas leyes que rigen nuestro universo. Sus abanderados son la astrofísica y la cosmología, campos en los que no podemos realizar experimentos (salvo mediante analogías físicas cuyo valor suele ser bastante discutible).
La catástrofe se avecina y no hay escapatoria posible. Nuestro Sol se está consumiendo poco a poco, día a día, hora tras hora, minuto a minuto. En su centro tienen lugar procesos violentos de fusión nuclear y los dicharacheros y revoltosos núcleos de hidrógeno se dan de tortas calientes unos contra otros, quedándose embarazados durante un suspiro, y pariendo velozmente núcleos de helio, mientras lanzan gritos de energía luminosa y calorífica en forma de brillantes fotones que viajan lentamente hasta la lejana fotosfera.
Hace algo menos de un siglo, la humanidad entró en contacto con una nueva visión del mundo y del universo que nos rodea que fascinaría desde entonces a físicos y legos por igual, tanto por lo extraño de su propuesta como por lo novedoso de la tecnología que de ella se podía derivar. Hace poco menos de un siglo, la humanidad descubrió (quizás construyó sería una mejor palabra) la mecánica cuántica y, desde entonces, se han escrito millones de páginas sobre esta nueva teoría.
Se trata de una extensa entrevista con Garik Israelian, un astrofísico de altísimo nivel que además está realizando una fantástica labor en el ámbito de la divulgación. Dos facetas que, como podréis comprobar a lo largo de este texto, conjuga a la perfección tras la organización de uno de los eventos científicos más increíbles de todo el mundo: El Festival Starmus que, en septiembre de este año, reunirá en Tenerife a científicos, astronautas, músicos, fotógrafos y artistas de primera fila.
La química no entiende de ética, ni de moral; no es buena ni tampoco mala. La química es química. Si se emplea adecuadamente puede contribuir a mejorar la calidad de las vidas de muchas personas; en cambio, cuando se hace un mal uso de ella, las consecuencias pueden ser desastrosas. Las reacciones químicas gobiernan y controlan prácticamente la totalidad de los procesos biológicos que conocemos. Pero, en ocasiones, esas mismas reacciones se pueden tornar mortales para los seres vivos y terminar con ellos para siempre.
Con esta entrada pretendo superar la frustración de los 140 caracteres y ofrecer algunas claves desde el punto de vista de la Inteligencia Artificial para que estas discusiones, lejos de terminar, puedan seguir estando muy vivas. Vamos allá.
Las estrellas de quarks son estructuras más allá de las más conocidas estrellas de neutrones. En éstas, los protones se han combinado con los electrones debido a la enorme atracción gravitatoria. En aquéllas, dicha atracción llega a superar incluso a los efectos cuánticos (presión de degeneración) que hacen mantenerse estables a los neutrones y éstos se descomponen en sus componentes más básicos: los quarks.
En una de las escenas de El Graduado, Ben (encarnado por Dustin Hoffmann) recibe consejos de uno de los amigos de sus padres, un tal Mr. McGuire, invitado a la fiesta para celebrar su graduación. Ante las dudas normales de cualquier graduado de cara a su inmediato futuro, McGuire le desliza de forma misteriosa que, al respecto, sólo le tiene que decir una palabra: Plásticos. Tras el mosqueo de Ben sobre qué quiere decir con ello, Mr. McGuire le contesta escuetamente que hay un gran futuro en los plásticos y que piense sobre ello.
Supongo que quienes me conocéis sabéis de sobras mi opinión sobre la enseñanza universitaria de la física en este país y el profundo odio que profeso hacia los problemas que aparecen en muchos de los libros de texto que utilizan (o deberían utilizar) los estudiantes. Pues bien, cuando eres profesor y compartes asignatura con otros excelsos profesores que no comulgan con tus ideas, por las razones que sean (eso ahora no importa), a la hora de hacer exámenes, preparar problemas para resolver en el aula, no te queda muchas veces más remedio que...
Hace algo más de 60 años, Watson y Crick publicaron el artículo en Nature con su propuesta de estructura para el ADN. En el último párrafo y entre otros, citaban a Rosalind Franklin y le agradecían sus “resultados experimentales no publicados e ideas”. Años más tarde, en el libro La doble hélice, crónica muy personal del descubrimiento de la estructura del ADN, James Watson escribió sobre ella que “el mejor lugar para una feminista era el laboratorio de otra persona”.
Con las uvas de Nochevieja es habitual que hagamos el firme propósito de que el nuevo año sea mejor, de solucionar algunos de los problemas que nos aquejan, de alcanzar algunos de los sueños que no logramos el año previo. Son los buenos propósitos del Año Nuevo y, en general, no tratan de un hecho puntual sino que comúnmente buscamos un cambio en nuestras vidas que tenga continuidad, queremos abandonar un mal hábito o desarrollar uno bueno.
Tuvo una carrera realmente prolífica (se cuentan más de 1.400 obras) y polifacética, y los estudiosos de su figura no dudan en compararle con el genial Alphonse Mucha, de cuyo estilo sin duda “bebía”. Sin embargo, pocos conocen el nombre y la obra de Eulogio Varela, un artista gaditano que tuvo entre sus amigos a Juan Gris y llegó a influir en Picasso.
¿Qué sucedería, pues, si tuviésemos la alocada idea de comparar, por ejemplo, las prestaciones de dos naves espaciales diferentes: una que siguiera un movimiento uniforme (esto es, con velocidad constante) y la otra que incrementase su velocidad continuamente de forma que mantuviera, pongamos por caso, una aceleración constante e igual a 10 m/s2 (el mismo valor que posee la aceleración a la que estamos sometidos en la Tierra debido a la gravedad)? ¿Cuál de las dos sería más eficiente? ¿Cuál nos llevaría más lejos? ¿Qué tiempo emplearían?...
La cafeína está de moda. En los últimos tiempos han aparecido en el mercado un gran número de productos que tradicionalmente no se asocian a la cafeína (1,3,7, trimetilxantina) pero en los que un análisis detallado de su composición demuestra como la presencia de este alcaloide no es nada desdeñable. Zumos enriquecidos, sprays anticelulíticos, suplementos deportivos, bebidas energéticas o chicles funcionales son algunos de los ejemplos de nuevos productos ricos en cafeína que pueden encontrarse en supermercados, farmacias, gimnasios, etc.
La creencia de que los números constituyen, de alguna forma, la esencia del universo es algo que ha acompañado la experiencia humana a lo largo de la historia, casi independientemente de la civilización que consideremos. Las pautas que se podían observar en el cielo o en la sucesión de las estaciones fueron la primera oportunidad para comenzar a descubrir los números de la naturaleza, y las necesidades agrícolas, comerciales y religiosas de las primeras civilizaciones fueron la motivación para inscribirlos en calendarios.
La teoría cuántica de campos (TCC) es un campo de la física en el que el formalismo matemático está presente en todas partes aunque no siempre de la mejor manera. La propia existencia y coherencia matemática de la TCC es un problema matemático que no ha sido probado. Hay diversas formas de definir una teoría cuántica de campos, ninguna se puede considerar matemáticamente completa, o consistente, o coherente.
#13 ¡Muchas gracias! Comentarios como este se agradecen muchísimo
#10 Como no sé si la viste, decirte que este lunes publiqué la segunda parte en el blog. Por si quieres leerla
#12 Hola, gracias por el aviso!
Tengo tu página en mi Feedly hace tiempo por lo que me entero de primera mano de las actualizaciones. El artículo lo tengo en pendientes pero en la mira para próxima lectura.
Aprovecho para decirte que me gustan mucho tus artículos y agradecerte el gran trabajo de divulgación se realizas.
#13 ¡Muchas gracias! Comentarios como este se agradecen muchísimo
#3 No puedo entender que para alguien sea una gilipollez que una persona quiera acercar los conceptos básicos a toda la sociedad. Por desgracia, no todos contamos con las mismas oportunidades y aún hay demasiadas personas que los desconocen. Explicarles de manera sencilla y amena las cosas me parece una tarea muy loable que el autor hace con toda la ilusión y el esfuerzo porque le importan esas personas.
Si un informático explicase conceptos básicos de su área me parecería fabuloso porque hay mucha gente que tampoco sabe de ello. De hecho me parecería excelente que cualquiera, de cualquier disciplina hiciese algo así.
Si a ti te parece muy fácil, me alegro por ti, puedes sentirte afortunado. Pero hay muchas personas que por motivos muy variados no los encuentran fáciles y les da vergüenza preguntarlos.
#14 Disculpa por tardar tanto en responderte. Como te ha dicho #17, las etiquetas se ponen a la entrada de los sitios donde se pueden superar los límites permitidos para el público, es decir, para cualquier persona que está por el hospital y no va a someterse a una prueba de rayos X. Pero en el lugar en el que se encuentra la etiqueta la radiación es equivalente a la radiación natural que recibes como persona humana que está vivita y coleando.
Es más, anualmente, se hacen controles de niveles en todas las dependencias y zonas colindantes a las salas de rayos x para asegurarse que no hay riesgo. Si te surgen más preguntas sobre radiaciones puedes ir al blog Desayuno con fotones y hacernos la pregunta y te responderemos encantados.
Un saludo cordial,
Laura